8 de Marzo, que no sea un día más
Promoviendo la Paz
Yanira Fondeur
El próximo jueves conmemoramos el Día Internacional de la Mujer y el lema establecido por la Organización de las Nacionales Unidas (ONU) para este año es “Ahora es el momento: Las activistas rurales y urbanas transforman las vidas de las mujeres”.
El 8 de marzo celebramos la lucha de la mujer por la valentía de defender sus derechos de participación e igualdad con el hombre, por lo que no se trata de una celebración comercial, para ofrecer regalos ni flores, esta significativa fecha recuerda la tragedia vivida por 100 trabajadoras de una fábrica textil de Nueva York que murieron en un incendio, después de que su propietario vilmente las encerraras por reclamar sus derechos laborales.
Se remonta al año 1911 la primera celebración de éste día en países como Alemania, Dinamarca, Suiza y Austria y es en 1975, hace 43 años, que la ONU lo declara como fecha internacional y dos años más tarde invita a todos los estados a declararlo como el Día Internacional por los Derechos de la Mujer y Paz Internacional.
Aunque las mujeres hemos logrado avanzar hasta los estamentos de estados, las estadísticas muestran la realidad que seguimos inmersas en muchas desigualdades en términos sociales, políticos y económicos.
En nuestro país, a pesar de que el 65 por ciento de la matrícula estudiantil en las universidades son mujeres y el 80 por ciento son las que se gradúan con honores, constituimos el segmento poblacional más desempleado, en una proporción de 54 de cada 100 a diferencia de 32 de cada 100 hombres.
Al dato anterior hay que adicionarle que, aun realizando un trabajo similar al hombre las mujeres ganan un 21 por ciento menos, lo que sin lugar a dudas constituye una gran discriminación en el aspecto salarial.
La realidad es que la mujer sigue siendo vista como objeto de propiedad y no como un sujeto con derechos y fruto de la cultura patriarcal somos frecuentes víctimas de muerte o maltratos por parte parejas o ex parejas, junto a la discriminación de que somos objeto a través de la publicidad y de las letras de las canciones de música urbana.
Cabe añadir además que, nuestro país tiene una de las tasas más altas de embarazos de adolescentes, ocupando un quinto lugar entre los países de América Latina y el Caribe, lo cual constituye como una de las principales causas de la deserción escolar.
También en la participación política la mujer está en desventaja y sólo basta por mencionar que contamos con 3 senadoras de un total de 32, 53 diputadas de 190, 19 alcaldesas de 158 y 3 ministras de 22 Ministerios.
Todas estas cifras que muestran inequidad de las mujeres frente a los hombres, nos permite concluir que el 8 de marzo no debe ser un día más, sino una fecha para mantenernos unidas en hacer valer la igualdad de derechos, si deseamos tener una mejor nación de relaciones más justas.
La autora es presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia.