Disertan sobre las estadísticas de la Bienal Nacional de Artes Visuales en el siglo XXI
Dustin Muñoz presentó un recuento detallado de los resultados de cada bienal, y en su conjunto, con un análisis profundo que motivan a repensar y reflexionar sobre el futuro de la BNAV, como parte importante del acervo cultural del país, y el rol de los actores que gravitan en torno a la entidad para la configuración del mismo.
Santo Domingo.- El artista visual Dustin Muñoz presentó la conferencia Las estadísticas de la Bienal Nacional de Artes Visual en el siglo XXI, en el marco de la celebración de la trigésima edición del evento que congrega a los artistas visuales del país, en el Museo de Arte Moderno (MAM).
Dustin Muñoz realizó un recuento detallado de los resultados de cada bienal, y en su conjunto, acompañado de un análisis profundo que motivan a reflexionar y repensar en el rol de los actores que gravitan en torno al máximo evento del sector artístico, y sobre el futuro de la BNAV. Analizando su configuración como parte importante del acervo cultural y la identidad dominicana para las actuales y futuras generaciones.
Tendencias en distribución de los premios
Muñoz explicó que “De los 70 premios que se han otorgado en las últimas ocho bienales, que tienen el citado modelo de premios igualitarios (sin distinción de categoría), la Instalación, con solo el 15.29% de participación ha recibido 25 premios, que constituye el 35.71% del total de premios otorgados; la Pintura, que es la expresión más cultivada, con un 35% de participación en esas mismas bienales ha recibido solo 14 premios, el 20% de los mismos.
“La Fotografía, con 15.89%, una participación muy similar a la de la Instalación, sin embargo, ha recibido solo 7 premios, el 10%. El Dibujo con un 13% de participación apenas ha recibido 5 premios con este modelo de bienal, que constituye el 7.14% de los premios. Y que teniendo una participación en las bienales mucho mayor que el Video y la Performance, ha recibido la misma cantidad de premios. Video y Performance, teniendo 5.17% y 2.28% de participación respectivamente, han recibido también cada una 7.14% de los premios”, reveló.
“La Escultura, con el 5.10% de participación ha recibido 4 premios, que constituye el 5.71% del total de premios otorgados. La obra gráfica con un 5.32% de participación ha recibido 2 premios, que constituye el 2.86% de los galardones; y la Cerámica con un 2.05% de participación ha recibido 3 premios, que constituye el 4.29%”, advirtió.
Los premios, la inversión del Estado y el peligro del patrimonio artístico nacional tangible
De los nueve Gran Premio otorgados, en igual número de bienales celebradas en el siglo XXI, 3 han sido Instalaciones, 1 Pintura, 1 Video, 1 Performance-video, 1 Fotografía y 2 Dibujos.
En términos monetarios, Muñoz informó que “se han entregado en premios RD$21,650,000 en las últimas ocho bienales, y la desigualdad se ha expresado de la siguiente manera: La categoría de Instalación ha recibido en premios RD$7,900,000 (36.49%); la Pintura RD$4,200,000 (19.40%); Dibujo RD$2,250,000 (10.39%); Fotografía RD$1,800,000 (8.31%); Performance RD$1,750,000 (8.08%); Video RD$1,300,000 (6.00%); Escultura RD$1,050,000 (4.85%); Cerámica RD$ 850,000 (3.93%); y, Obra gráfica RD$ 550,000 (2.54%). Señores en 20 años, RD$ 550,000 es la inversión del Estado en Obra gráfica para la colección del Museo de Arte Moderno.”
Reiteró, “la instalación ha recibido en premios RD$7,900,000. Una categoría que representa el 15.29% de las obras seleccionadas en las últimas 8 bienales y recibe más recursos, por esta vía, que las tres categorías más cultivadas por los artistas nacionales: Pintura, Escultura y Dibujo, que representan el 53.9% de las obras seleccionadas en las últimas 8 bienales y que juntas solo han recibido RD$7,500,000.”
Muñoz hizo un llamado, al referir que “en el 2007 se otorgaron 4 premios a instalaciones, en el 2013 se otorgaron 5, en el 2021 se otorgaron 3, y en esta entrega del 2023, 7 de los 10 premios del jurado funcionan como instalaciones, seis nombradas como tal directamente y la otra obra tipificada como cerámica, pero que en realidad es también instalación. Si el Jurado de Premiación no explica las razones objetivas que justifiquen haber dejado desiertas cinco categorías de nueve que participaron, resulta ser entonces, una total desconsideración a los artistas participantes en esas categorías, que están ahí solo para legitimar este tipo de arbitrariedad y de exceso.”
“En lo que va de siglo el Estado ha destinado cerca de 10 millones de pesos en expresiones contemporáneas ponderadas por los jurados de premiación, a través de las bienales, muchas de ellas de durabilidad claramente efímeras y otras de conservación evidentemente complejas. Y si bien es cierto que los artistas creadores de esas piezas merecen todo nuestro respeto y consideración, y los jurados, que metieron al Estado en esas adquisiciones efímeras, también; lo cierto es que con más razón merece respeto el pueblo dominicano, del presente y del futuro para que se le permita nuevamente volver a contemplar dichas obras ganadoras”, manifestó el Muñoz.
“premiar obras efímeras es un lujo que la República Dominicana no se puede dar. Un país que aún necesita un patrimonio artístico tangible y más museos. La realidad es que muchas de esas piezas, luego de pasado el evento, parece que a nadie más les importa su suerte, a nadie. Y a veces parece que a la población dominicana tampoco les hacen falta esas obras ganadoras, parece que nadie las reclama, ni los artistas que las crearon, ni los jurados que las eligieron, ni los organizadores de la bienal. Esta indiferencia es una realidad que aturde a todos los que soñamos con tener una colección que mostrar a las presentes y futuras generaciones” reflexionó Muñoz con un llamado a la sociedad.
La conferencia fue realizada el 14 de los corrientes, en el Auditorio del MAM, ante un aforo completo con la presencia de destacados artistas de diversas disciplinas, gestores culturales, personalidades académicas, coleccionistas, galeristas e interesados en la cultura.
Del conferencista
Dustin Muñoz nació en 1972, oriundo de Loma de Cabrera, Dajabón. Es egresado de la Escuela Nacional de Bellas Artes, es Doctor en Filosofía por la Universidad del País, posee una Maestría en Metodología de Investigación Científica y es licenciado en Filosofía, Magna Cum Laude, por la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Es profesor en la Escuela Nacional de Artes Visuales y en la Escuela de Filosofía de la UASD, conferencista y escritor especializado.
Ha obtenido primer premio de pintura en múltiples concursos y en bienales, recibiendo numerosas distinciones, entre ellas el Premio de Pintura en la 29 Bienal Nacional de Artes Visuales (2021), el Premio Nacional de Ensayo Pedro Henríquez Ureña (2019), el Premio Nacional de la Juventud (2005) y la premiación de JCI Jaycees 72 como Joven Sobresaliente de la República Dominicana (2004).
Ha realizado cinco exposiciones individuales y participado en colectivas nacionales y extranjeras. Sus obras se encuentran en colecciones públicas y privadas y en museos nacionales y internacionales. Sus murales se exhiben en tres de las principales catedrales del país y en el emblemático Obelisco de la Ciudad de Santo Domingo. Decenas de libros de diversas áreas llevan portadas con obras de su autoría y tres de sus obras han sido seleccionadas para sello postal del Instituto Postal Dominicano.