La maravillosa Isla Saona vista desde lo alto: Kilómetros de playas vírgenes y exótica naturaleza que motoriza excursiones de turistas
Son famosas las excursiones a este paraíso tropical, en especial para los turistas que vienen a Punta Cana y Bávaro. Desde Santo Domingo muchas familias, sobre todo parejas, disfrutan esta aventura.
Punta Cana.- La Isla Saona, tan admirada y deseada por los turistas extranjeros en el país por sus maravillosas bellezas, es uno de los lugares poco conocidos por el común de los dominicanos.
“Cuando sueñas con el paraíso probablemente estás pensando en Isla Saona”, describe la red social @IslaSaonaRD.
Con flora y fauna protegidas, por ser parte del Parque Nacional del Este, es la isla más grande de República Dominicana, con unos 110 kilómetros cuadrados de extensión.
Son famosas las excursiones a este paraíso tropical, en especial para los turistas que vienen a Punta Cana y Bávaro. Desde Santo Domingo muchas familias, sobre todo parejas, disfrutan esta aventura.
Tienen a su vista kilómetros de playas vírgenes, arenas blancas finas con aguas cristalinas, atractiva vegetación y gran variedad de especies animales desde aves hasta reptiles. Manglares, lagunas y una gigante piscina natural.
Para ir de excursión a la Isla Saona, primero se tiene que trasladar hasta la localidad de Bayahibe, de donde parten los barcos y catamaranes hacia la isla. El viaje de catamarán hasta la Isla Saona dura aproximadamente unas 2 horas.
Qué ver en Isla Saona
Además de las paradisíacas playas, la Isla Saona es famosa por la abundancia en sus costas, de los arrecifes de coral y especies marinas como estrellas del mar, tortugas marinas y peces exóticas.
Una de las atracciones turísticas de la Isla Saona es la de una piscina natural más grande del mundo, ubicada en el medio del mar a 400 metros de las costas, una zona en donde la profundidad apenas llega un metro, ideal para zambullirse.
También es un lugar perfecto para ver y tocar toda clase de especies marinas exóticas presentes debajo de la piscina, como estrellas marinas, corales, peces tropicales, conchas y caracoles. Sin duda, una de las mejores atracciones que presenta isla.
En la isla podemos presenciar algunos mamíferos exóticos, algunos en peligro de extinción, como el manatí. Tiene también interesantes yacimientos arqueológicos y cuevas que eran utilizadas por los indígenas tainos.
La población de la Isla Saona es pequeña, de unos cientos de habitantes en total, quienes se dedican mayormente a la pesca y atención de los turistas.
Exactamente cuenta con dos asentamientos humanos permanentes, los poblados de Mano Juan y Catuano. Mano Juan es un pueblo de pescadores con casas de madera y Catuano es una playa, la cual tiene un destacamento de la marina de guerra.
La isla contiene un alto porcentaje de especies endémicas y riqueza floral. De las 539 especies reportadas en el Parque Nacional Cotubanamá, la mayoría se encuentra en este lugar.
Recursos naturales
En la zona aparecen varias asociaciones de especies vegetales, las cuales integran diferentes e ecosistemas, entre los que se pueden distinguir los bosques semi-húmedos, matorrales, y los manglares o bosques salados, que se componen de cuatro especies neo tropicales: mangle negro, rojo, blanco y botón.
En la Saona también se han identificado especies de tortugas marinas incluyendo caguama, carey, tortuga verde y tinglar. Entre las aves se pueden apreciar gaviotas playeras, zancudas, la paloma coronita, y la cotorra verde, la cual está en peligro de extinción. Otros fascinantes animales como la iguana rinoceronte, el manatí, el delfín y el murciélago pescador son también parte de los habitantes de la isla.
Se han reportado 40 especies de peces, 10 de corales, y 124 de moluscos, calificando la zona como una de las más importantes reservas ecológicas del país. Esta tiene una piscina natural en la cual el agua no pasa del ombligo, también encontramos estrellas de mar de diversos tipos y con colores caribeneos, además de disfrutar de esta belleza natural debemos decir que solo estamos a unos pasos de la costa y el agua es aún más cristalina.
Historia
Adamanay fue el nombre dado a esta isla adyacente al Parque Nacional Cotubanamá por los indígenas tainos. Se registra que Cristóbal Colón pisó el suelo de la isla por primera vez el 14 de septiembre de 1494 durante su segundo viaje, y la nombró Bella Savonesa en honor al Savonés Miguel da Cuneo (Miguel da Cunio), quien advirtió que se trataba de una isla independiente de la entonces ya nombrada La Española.
En esta isla se encuentra la famosa Cueva de Cotubanamá, nombrada en memoria del cacique taíno a principios del siglo ХVI, quien huyendo de las matanzas de Nicolas de Ovando, decidió sin mucho éxito buscar refugio en la isla, siendo capturado y ejecutado.
En tiempos del dictador Rafael Trujillo esta isla fue adjudicada a su familia, quienes explotaron los cocotales que existían desde una fecha indeterminada.
Fue este presidente quién construyó en 1944 el poblado de «Mano Juan» para albergar a 14 familias que se asentaron, y desde entonces sobrevive como único centro habitado en el Parque Nacional Cotubanamá. Este poblado fue usado también como un coto de caza, punto de crianza extensiva de ganado y lugar para desterrar a los disidentes políticos del régimen del dictador.
El 16 de septiembre de 1975 fue creado el Parque Nacional Cotubanamá por el presidente Joaquín Balaguer, mediante el decreto presidencial 1311.
Redacción de AplatanaoNews con datos de TodoPuntaCana y Wikipedia
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