«Recuperando la Motivación»
PsicoIdeas
Patricia Sánchez del Castillo
Luego de nuestras acostumbradas vacaciones navideñas, vacaciones colectivas, o algún tiempo fuera del área laboral, muchos nos preguntamos, porque no tenemos deseos de hacer nada, o se nos hace cuesta arribas recuperar la rutina.
Existen causas psicológicas para que se de este fenómeno, como desgastes psicológicos por un exceso de trabajo, o también por ausencia de este, ausencia de energía, motivación , sensación de estancamiento emocional, entre otras tantas, por lo que veremos las más comunes en estos tiempos.
Cabe resaltar que la sensación de estancamiento emocional, y la falta de motivación, suele ser plasmada en un pensamiento general ´´ no tengo ganas de hacer nada ´´, lo cual bloquea nuestro estado emocional y mental, y pone freno a todo deseo de realizar cualquier actividad.
Tomando en cuenta que no es lo mismo falta de motivación, que holgazanería o cansancio, que la falta de interés, o deseo de realizar cualquier actividad. Más bien esto es una disposición psicológica en la cual las personas tienden a creer que no tiene sentido plantearse metas u objetivos ya sea a corto o largo plazo.
Entre las características comunes tenemos:
Vida sedentaria, Aislamiento y falta de interacción social, Abandono de proyectos e inversión menor de tiempo en ellos, Sentimiento de que se vive sin rumbo, falta de objetivos, e ilusiones, solo se tiene deseos de Dormir, o estar en cerrado.
En los casos más extremos las personas tienden a manifestar lo que los especialistas llaman Abulia, siendo esta la ausencia casi total de los deseos de vivir o realizar cualquier actividad, frecuentemente aparece junto a la Anhedonia, que es la incapacidad de experimentar placer, la que se complementa con el sedentarismo.
Cuando estos síntomas perseveran es importante asistir cuanto antes, a la ayuda profesional de psicólogos de la salud mental, debido a que estos problemas emocionales, tienen trasfondos psicológicos y tienden a afectar seriamente la calidad de vida de quienes la padecen e incluso de sus allegados más cercanos.
Por lo que para recuperar la motivación los expertos en salud psicológica y técnicas de motivación, recomiendan: Adoptar compromisos, poner manos a la obra para salir de este estado, y plasmar acciones, ayudará a materializar las metas.
Relacionarse con los demás, es importante romper con la rutina, y ampliar nuestro círculo de amistad, ya que otras personas nos aportan nuevas perspectivas, filosofías de vidas, y sirven de motivación.
Practicar ejercicios físicos, es parte de la solución para activarse tanto física, como mentalmente, por lo que es bueno practicar de 25/30 minutos de ejercicios diarios, lo cual ayuda a alcanzar un buen estado de ánimo.
A esto le sumamos llevar una vida saludable, alimentándonos de manera balanceada, para no quedarnos sin energías con facilidad, dormir lo justo, ni muy poco, ni demasiado.
Es bueno dividir los proyectos, y establecer objetivos realistas a cortos plazos, es importante una vez que iniciemos a realizar algo, dedicarle tiempo cada día, de manera ordenada y en secuencia para que sea eficaz.
Y en casos extremos como ya hemos dicho antes, es importante, saber buscar ayuda cuando ya nuestras opciones se vean escasas, y nunca está de más contar con la ayuda psicológica de un terapeuta, siendo esta una manera de apostar fuerte a la recuperación de la motivación.
Siendo la motivación esa acción y efecto de motivar, razón, o motivo que provoca la realización de una acción o actividad.
Tomando en cuenta que nuestro motor debe de ser los demás, que ´´ el verdadero valor de la vida se trata de las personas´´. Tu momento es ahora, el único momento que vas a vivir, no ayer, ni mañana, este es tu momento, siendo estas afirmaciones una de las
nuevas filosofías de tendencia Mindfulness, iniciemos por practicarlas para una vida con motivación.
La Autora es Psicóloga Industrial/ MA Gerencia Recursos Humanos