4 datos sobre el Domingo de Ramos 2020 en el contexto del coronavirus, ramas verdes en puertas y ventanas
El próximo 5 de abril la Iglesia celebrará Domingo de Ramos y dará inicio a la Semana Santa, uno de los tiempos litúrgicos más importantes en la vida cristiana pero que este año tiene una serie de modificaciones debido a la pandemia mundial del coronavirus COVID-19.
La Santa Sede, así como las iglesias particulares, han emitido varias disposiciones para la celebración de esta y otras fechas de Semana Santa.
Aquí algunos datos a tomar en cuenta.
- La mayoría debe celebrar Domingo de Ramos desde casa
Para el Domingo Ramos del 2020 la mayoría de fieles solo podrán participar de la Misa y ritos desde sus casas, en familia, y a través de los medios de comunicación. Se debe prestar atención a los horarios de las transmisiones en vivo parroquiales, diocesanas, de canales de televisión católicos como EWTN o del mismo Vaticano.
- Algunas procesiones se celebrarán al interior de los templos
Algunas diócesis, como la Arquidiócesis Primada de México, anunciaron que la Misa de Domingo de Ramos se celebrará a puerta cerrada en cada templo parroquial, catedral y basílica, y que la Procesión de Ramos se realizará dentro del templo cuidando siempre que en éste no existan más de 20 personas.
- Las palmas podrán colocarse directamente en las puertas de las casas
No es necesario utilizar hojas de palma para esta ocasión. Recientemente, se dio a conocer una iniciativa que invita a los fieles a poner una rama verde bonita, de cualquier tipo y arreglada en casa, en la ventana o puerta de las viviendas durante la tarde del sábado 4 de abril, para que el Domingo de Ramos todas las casas amanezcan con una rama.
Esta es una manera de proclamar y aclamar a Cristo como nuestro Rey y Salvador, y además es un símbolo anticipado de su triunfo pascual.
- Se puede hacer una pequeña liturgia para colocar las ramas
Algunos obispos han ofrecido una oración especial familiar para el momento en que se coloquen las ramas.
El Arzobispo de Piura y Tumbes (Perú), Mons. José Antonio Eguren, propuso una oración que servirá como “proclamación pública de que allí vive una familia o alguien que es discípulo-misionero de Jesucristo, y miembro de Su Iglesia”.
Aciprensa
Imagen referencial / Crédito: Unsplash