El valor de la responsabilidad
Por Alliet Ortega
Desde mi Perspectiva
Esta semana en desde mi perspectiva quiero hablarles de algo que en estos días ha cobrado un alto sentido personal, profesional, y laboral, bueno en pocas palabras en todos los aspectos de mi vida, quiero que hablemos del valor de «La Responsabilidad», un término que tiene muchos significados.
La mayoría de sus significados están vinculados a la libertad de elección que tiene el ser humano, y de aceptación de las consecuencias de sus actos efectuados en virtud de esa libertad, y es que el hombre es el único ser conocido que tiene responsabilidad, solo los humanos pueden escoger consciente y deliberadamente entre alternativas de acción y esa elección tiene consecuencias.
En estos momentos en que la crisis de esta pandemia nos ha cambiado todos nuestros esquemas, que exige tanto de nosotros, y que se nos demanda a cultivar valores como la empatía, confianza, asertividad, entre otros, yo quiero apelar a que nos enfoquemos en el valor de la responsabilidad, y es que muchas situaciones que se nos enfrentan en la vida la podemos evitar si realmente hacemos un ejercicio consciente de ser responsables.
Desde mi perspectiva la responsabilidad es uno de los valores que más se le debe demandar a cualquier individuo, a los profesionales, a los gestores que ejercen la función de liderazgo, políticos, funcionarios públicos, y porque no a las organizaciones como parte de su compromiso social, y es que la práctica de la responsabilidad es algo que debemos de hacer día a día con nuestras acciones.
A mayor nivel de conciencia, tendremos mayor habilidad de respuesta, y por consecuencia mayor calidad en la respuesta, en el proceso, y en el resultado final, y es que cuando nos manejamos con responsabilidad tendremos mayor habilidad para dar respuesta a las situaciones que nos da la vida.
La responsabilidad tiene un enorme poder en la transformación, en los proceso de cambio, ya que gracias a ella podemos cuestionarnos en que medida hemos sido, consiente o inconsciente con nuestras acciones, si carecemos de responsabilidad , siempre tendremos a señalar a otros como responsables de nuestras propias acciones, y es que si algo no va bien, debemos de ser honestos y preguntarnos en que medida estamos contribuyendo con esto.
Solo cambiando puedo cambiar mi realidad, pero siempre estando claro de que debo ser responsable de mis acciones, cuando somos responsables no miramos el error como un fracaso, sino como un aprendizaje. Pero esto es fácil decirlo, pero en verdad es que es un valor que está en la conciencia de la persona, que le permite reflexionar, administrar, orientar y valorar las consecuencias de sus actos, y muchas veces esto no sencillo.
Desde mi perspectiva te invito a mejorar tu responsabilidad, en todos los planos, a nivel personal, laboral, y familiar, y el camino más rápido es apreciar claramente que de nuestro comportamiento dependen cosas grandes, y apoyarte en cultivar otros valores, o virtudes que se relacionan mutuamente con la responsabilidad, y quiero dejarte dos que la complementan:
Valentía. – Para dar cuenta de los propios actos, ya que hace falta un valor capaz de superar el temor al castigo. (Responsabilidad ante los demás).
Humildad. – El orgullo dificulta pedir perdón; mientras que la persona humilde reconoce sus fallos, y con esto somos capaces de aprender de nuestros errores, ser responsables ante uno mismo.
Y es que desde mi perspectiva una manera de entender la responsabilidad es la capacidad que tengamos de dar respuesta, responder responsablemente nos da valor como personas, comprometidos en cada uno de nuestros actos, pero es un ejercicio que implica pensar, y sentir, momento a momento cual es la respuesta que se nos está requiriendo, especialmente ante situaciones complejas.
O en momentos de crisis, como el que actualmente vivimos, y es que no hay una mejor aptitud ante la adversidad que construir el valor de la responsabilidad, si queremos cambiar nuestro entorno, nuestro aquí y ahora, debemos de ser responsables, simplemente seres humanos más responsables. Hasta una próxima entrega.
@etteilla