La tradición de nochebuena:

Laura Saint-Hilaire
Buzón de mis  Reflexiones

La nochebuena se festeja todos los años en el mes de diciembre el día 24.

Su mayor motivo a celebrarse es debido a la víspera de la navidad o del nacimiento de nuestro señor Jesucristo el día 25 de diciembre.

La tradición de nochebuena en las casas dominicanas es una de las más esperadas y disfrutadas en navidad.

En este día la familia se reúne y de manera muy particular solemos realizar con esmero, emoción y con la boca hecha agua; una cena especial.

Esta cena es de suma importancia para todo el dominicano; desde la emotividad y dinamismo de preparar los alimentos hasta su degustación.

Este gran festín tiene como lujo un banquete de platos tradicionales, postres y bebidas.

Los dominicanos llevan décadas festejando la noche buena con un menú especial en familia o comunidad.

Entre algunos de los alimentos más elaborados por los dominicanos para esta cena navideña podemos citar los siguientes:

Moro de gandules, ensalada rusa, verde o mixta, pastel en hoja, pollo horneado, teleras, lechones, lasagnas, frutas, ponches, sidras, cervezas, entre otros.

Generalmente en los hogares de nuestro país se preparan grandes cantidades de comida para este día y son consumidas y compartidas entre todos.

Recordando que el 25 de diciembre nuestra isla en particular efectúa el tan mencionando día del calentado; lo que quiere decir que al día siguiente de la “noche buena”; se calientan los platos y se almuerza en familia nuevamente.

El costo a invertir en esta cena dependerá de la cantidad de miembros en la familia y de los estándares sociales de las mismas.

Un buen manejo económico permitirá a todos los ciudadanos dominicanos suplirse con lo necesario para llevar a cabo una verdadera noche buena.

Además de la afamada cena también se comparten grandes anécdotas, reflexiones, consejos y bailes.

La música es la protagonista en materia de festividades para el dominicano. Por supuesto nuestra gracia, sabor y chispa hace de estos momentos grandes eventos familiares.

Un punto que no puedo dejar de mencionar; es el hecho de que estamos en una situación distinta a lo que estamos acostumbrados en navidades anteriores.

Sabemos que como pueblo amamos contagiarnos de alegría y gozo.

Es una de las características más bellas que poseemos como nación, por ende sigamos cultivándola pero tomando en cuenta los factores de prevención necesarios debido al COVID-19.

A raíz de esta pandemia mundial también quiero incitar a la colaboración con las comunidades o individuos más necesitados. Para que ellos también puedan pasar una noche buena digna.

Te invito cordialmente a donar, regalar, ofrecer o comentarle a un ser querido sobre la situación de alguien que quizás no posee la economía para comprar sus alimentos y hacer una cena con sus familiares; unificándonos podemos alegrarle la vida a tantas familias con un plato de comida.

Esa es la verdadera magia de la navidad y de la vida.

Ayudar a los demás siempre será un valor incalculable.

Por otro lado, deseo que todos mis lectores puedan llevar a cabo sus reuniones familiares navideñas con prudencia, amor y llenos de las mejores vibras.

Feliz noche buena y felices fiestas.