Raquel Peña resalta 100 años de la Cámara Española como puente de
Manolo: líder de una generación de jóvenes, su lucha y final en escarpadas montañas de Quisqueya
La sublevación fue iniciada la noche del 28 de noviembre de 1963, en rechazo al golpe de Estado al presidente Bosch.
Fernando Quiroz | Director Aplatanao News
El 21 de diciembre se conmemoró el 57 aniversario del fusilamiento del líder revolucionario Manuel Aurelio Távarez Justo (Manolo), junto a grupo de compañeros.
A raíz del golpe de Estado al presidente constitucional Juan Bosch, el 25 de septiembre de 1963, y el paso a un gobierno dirigido por un Triunvirato, Manolo lideró una insurrección armada en reclamo de la vuelta a la constitucionalidad.
La sublevación fue iniciada la noche del 28 de noviembre de 1963. Manolo era el líder de la Agrupación Política 14 de Junio.
Viendo el curso de los acontecimientos en el país, lo había advertido en un discurso icónico el 14 de junio de 1962.
“Óiganlo, señores de la reacción, si imposibilitan la lucha pacífica del pueblo, el 14 de Junio sabe muy bien dónde están las escarpadas montañas de Quisqueya; y a ellas, a ellas iremos, siguiendo el ejemplo y para realizar la obra de los Héroes de Junio de 1959, y en ellas mantendremos encendida la antorcha de la libertad, el espíritu de la revolución….porque no nos quedará, entonces, otra alternativa, que la de libertad o muerte”.
Eran seis frentes guerrilleros, cubriendo las montañas de la geografía nacional, con la participación de unos 113 hombres. Manolo encabezó en Manaclas, San José de las Matas, Santiago, el frente “Enrique Jimenes Moya”, en honor al comandante de las Expediciones de Junio de 1959, procedentes de Cuba, contra la dictadura de Trujillo.
Los otros frentes guerrilleros fueron “Juan de Dios Ventura Simó”, en Bonao-Ocoa; “Gregorio Luperón”, Puerto Plata; “Hermanas Mirabal”, San Francisco de Macorís-Nagua; “Francisco del Rosario Sánchez”, en las lomas de Enriquillo “Mauricio Báez”, El Seibo-Miches.
El fusilamiento de Manolo, y compañeros del frente que encabezó, se produjo el 21 de diciembre de 1963, tras deterioro físico y cansancio de muchos de ellos. Los fueron fusilando uno a uno. Manolo fue el último, y gritaba que solo lo mataran a él, como responsable.
Dimensión de héroe
Rafael Pérez Modesto, sobreviviente del frente “Juan de Dios Ventura Simó”, considera que Manolo es un héroe y mártir nacional, que merece por siempre el respeto del pueblo dominicano y un ejemplo de lucha por la Liberación Dominicana.
La presidenta de la Fundación Patriótica Manolo Tavárez Justo, Elsa Justo, prima y hermana de crianza de Manolo, cuenta que desde adolescente, ya Manolo se inclinaba a expresar descontento por las injusticias sociales.
La madre de Manolo, Josefa Justo de Tavárez, y su padre Rafael Justo, eran hermanos.
Manolo fue enviado por su padre Manuel Tavárez desde Monte Cristi a Santo Domingo a realizar el tercer y cuarto bachillerato. Luego estudió derecho en la Universidad de Santo Domingo.
Igual idea tuvo la familia de Lisandro Macarrulla, padre del actual ministro de la Presidencia, y quien fue muy amigo de Manolo.
En su pueblo ya había efervescencia de la juventud de luchar contra la dictadura, sobre todo a través de Juventud Patriótica. Creció en un ambiente familiar de mucho respeto y cariño.
Relata que el día que Manolo partió para Santiago, el 24 de noviembre de 1963, a cuatro días de su insurrección en las montañas, le llamó por teléfono y a su hermana Ángela. Él vivía con ellas en un apartamento de la calle Rosa Duarte, en Gazcue.
Les expresó que no se preocuparan, que todo sería un éxito, y que pronto se volverían a ver.
Califica su muerte como un asesinato cruel, pues hasta bajaron con banderas blancas para entregarse, y fueron fusilados por los militares del Triunvirato.
Noviembre es para la familia muy difícil. La muerte de las Hermanas Mirabal y de Manolo. Los restos reposan en el panteón en la Casa Museo, de Ojo de Agua, Salcedo.
La grandeza de Manolo radica, dice Elsa, en que fue un líder de carisma extraordinario, innato. Inspiraba mucho respeto.
También, la arquitecta Maricela Vargas, vicepresidenta de la Fundación Manolo Tavárez Justo, lo recuerda como valiente y heroico.
“Comandante Manuel Aurelio Tavárez Justo, junto a tus compañeros fuiste asesinado, después que le habían prometido respetar sus vidas, otro crimen de lesa Patria, los asesinos quedan sin pagar sus crímenes, un mensaje muy negativo para las nuevas generaciones”, expresa.
Integran la fundación, igualmente Arnulfo Reyes, secretario general; Radhamés de Armas, tesorero y Domingo Fermín, vocal.
Las luchas de Manolo tuvieron varias fases. Junto a su esposa Minerva Mirabal, quien fue asesinada por la tiranía trujillista, junto a sus hermanas Patria y María Teresa, el 25 de noviembre de 1960, fundó el movimiento clandestino 14 de junio en homenaje a las expediciones de junio de 1959 contra la dictadura. Pasó varios meses en prisión cuando fue develado el movimiento, al igual que Pedro González, esposo de Patria, y de Leandro Guzmán, de María Teresa. Tras la dictadura formó el 14 de Junio como organización política.
En el matrimonio con Minerva procreó a Minou y a Manolo Tavárez Mirabal.
Encierros y torturas
Sobre el Movimiento Clandestino 14 de Junio, que lideró junto a su esposa Minerva Mirabal, llegó a describir las prisiones, torturas, muertes, coacciones económicas, atropellos morales y materiales, a partir de enero de 1960.
“Sufrimientos indecibles, y toda esa enorme montaña de padecimientos inenarrables, que sabe el pueblo, no pudieron ni podrán apartarnos de nuestro ideal de libertad absoluta, de libertad o muerte”, enfatizaba.
Manolo aumentó su liderazgo en prisión. Pese a su deterioro físico por los golpes, animaba a sus compañeros. Su firmeza ideológica la mantuvo hasta cuando fue aislado en la cárcel, tras el asesinato de las hermanas Mirabal, incluyendo a su esposa Minerva.
Así lo confirma Leandro Guzmán, compañero de lucha, quien fue esposo de María Teresa Mirabal. Evocó los meses en prisión junto a Manolo, en su memoria “1J4 De Espigas de Fuegos”.
“La vida nos juntó de modo tal que no voy a decir que yo fui quien mejor lo conoció, pero sí, que en la prisión, durante las torturas, el aislamiento y en la tristeza, es cuando realmente se conocen a las personas”, escribió.
Era, agregó, un hombre capaz de luchar hasta la muerte, de figura imponente, pero a la vez, de una humildad insólita.
Críticos discursos
“Santo Domingo y su pueblo, repetimos, nunca han sido tenidos en cuenta; que nacieron esclavos y siguen siendo esclavos, que han sido maltratados, saqueados, vendidos: que han sido propiedad de los españoles, los franceses, de los haitianos, de los norteamericanos, de los dictadores nativos y de los grupos de privilegiados”, denunció Manolo.
Ese discurso lo pronunció el 30 de julio de 1961, a dos meses de la muerte de Trujillo, en una concentración en el parque Duarte, de Santiago.
“Surge el ‘14 de junio de 1960’ como consecuencia de su ejemplo, toda nuestra historia de martirio, de dolor, de muerte, viene a constituir también, nuevas condiciones y se va caracterizando o precisando la formación de la conciencia revolucionaria nacional del pueblo dominicano”, expresó Manolo en una concentración en el Parque Independencia, en conmemoración del tercer aniversario de Las Expediciones de 1959, el 14 de junio de 1962.
Todo el pueblo se estremeció con heroísmo y patriotismo, destacaba, con respeto a esa gesta.
Una fuerte crítica hizo Manolo en un discurso pronunciado en el acto celebrado en el Parque Colón de Santo Domingo, el 16 de septiembre de 1961.
“Nuestra Constitución ha sido cambiada innumerables veces, para satisfacer las aspiraciones egoístas el individuo o del partido en el poder, jamás ha sido enmendada en interés del pueblo general”.
Compromiso de generaciones
Pérez Modesto, participante y sobreviviente de la Guerrillas constitucionalista de 1963, entiende que las generaciones de hoy y mañana tienen el deber y compromiso, de rendirle homenaje a ese fiel continuador de la causa, programa y lucha de los expedicionarios de la Raza Inmortal, que junto a las hermanas Mirabal y centenares de buenos y nobles dominicanos, formaron el Movimiento Clandestino “14 de Junio”.
“Consecuente y tenaz luchador antitrujillista, de excelso valores políticos en pro de la democracia, la soberanía del país y la justicia social”, le definió.
Fotos/ Archivo General de la Nación