La felicidad se comparte
Laura Saint-Hilaire
Buzón de mis Reflexiones
El estado de ánimo en el cual todo ser humano experimenta un sentimiento o sensación plena, armónica y satisfactoria es denominada como FELICIDAD.
La felicidad es relativa, dependerá de muchos factores para obtenerse y debemos trabajarla para conseguirla.
Cada persona busca lo que le hace feliz, bajo este contexto podemos sustentar que la felicidad de alguien probablemente es el sufrimiento de otra persona.
Sin embargo, mayoritario es el número de personas que se afianzan a la definición del primer filósofo griego que estudió rigurosamente la felicidad, este fue Aristóteles.
Aristóteles estaba seguro de que obrar bien, llevar una vida con ética y virtud, era un requerimiento primordial para poder ser felices.
Mientras que en el plano religioso, se considera que el camino a la felicidad es estar en cercanía con Dios; mantener la fe y actuar sin causarle mal al prójimo.
Por otro lado, según la disciplina psicológica la felicidad se define como un estado emocional de carácter positivo; que los individuos alcanzan cuando dan por satisfechos sus deseos, objetivos y sienten su vida ligera en gran manera.
Lo cierto, es que la felicidad es más sencilla de lo que pensamos y a continuación tal vez se pueda interpretar un poco escéptico.
La vida está llena de artificios para catapultar la felicidad, normalmente estamos tan concentrados en nuestra vida cotidiana, que olvidamos el más importante objetivo, su encanto.
Tendemos a creer que la felicidad viene enrollada en exuberantes lazos, con características llamativas.
Pero la verdad es que, la felicidad es tan simple como estar presente en los momentos que realmente nos dan vida. Como llegar a casa después de una jornada larga de trabajo y encontrar a tu familia esperándote para la cena, como disfrutar cada minuto con los abuelos porque sabes que estos serán eternos en la memoria o la presencia de dos palabras que nos reconfortan en todo momento; Por ejemplo: Un Te amo inesperado.
El enfoque que nos lleva a una burbuja de felicidad siempre tendrá un cambio presente, así como cambian nuestras prioridades u objetivos; de esa misma manera se girará el enfoque a la felicidad.
Y aunque no es absoluta porque la vida misma no lo es. Más bien es la estrategia perfecta que nos impulsa siempre a estar entusiasmados y llenos de vida en busca de conseguirla o disfrutarla cuando tenemos la oportunidad.
Esos pequeños momentos que logran iluminarnos y guiarnos debemos esparcirlos con los demás.
Tomando en cuenta que para compartir la felicidad. Solo basta con tener una buena actitud ante la vida y crear un ambiente propicio para disfrutar de lo que realmente importa con la gente que queremos, sin hacerle daño a los demás.
20 DE MARZO DÍA INTERNACIONAL DE LA FELICIDAD.
A mí me hace feliz escribir y compartirlo con los que son felices leyendo.
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