Por qué comer alimentos ultraprocesados puede aumentar la depresión según nuevos estudios
Un estudio americano y otro español avalan la relación entre alimentos ultraprocesados y depresión.
Científicos del Hospital General de Massachusetts y la Escuela de Medicina de Harvard han publicado hace unos días en la revista JAMA Network Open el estudio Consumption of Ultraprocessed Food and Risk of Depression que vuelve a asociar el desarrollo de depresión con la ingesta de alimentos ultraprocesados. Por su parte, otro estudio español realizado por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) ha arrojado luz sobre la relación entre el consumo de alimentos ultraprocesados y los síntomas depresivos, así como su impacto en regiones cerebrales específicas. Hace años que la ciencia intenta desentrañar las relación que existe entre la comida basura y la salud cerebral, en concreto, entender el grado de relación causa-efecto que existe entre este tipo de alimentos basura y la depresión. A fecha de hoy, ni siquiera se conocen los mecanismos que los asocian pero sí que existe esa relación.
EDULCORANTES ARTIFICIALES Y BEBIDAS ENDULZADAS ARTIFICIALMENTE Y SU PAPEL EN LA DEPRESIÓN
El estudio americano analiza la relación entre el consumo de alimentos ultraprocesados (especialmente edulcorantes artificiales y bebidas endulzadas artificialmente) y el riesgo de desarrollar depresión, concluyendo que, efectivamente, podría aumentarlo. Aunque, como señalan los autores, otros muchos factores influyen en el desarrollo de la depresión con lo que nos encontramos aún con datos muy preliminares. Lo que sí vuelve a resaltar este estudio, declara Andrew Chan, profesor de la Facultad de Medicina de Harvard y uno de los autores del estudio, es que la dieta «es tan importante como otros factores comunes que consideramos que influyen en la salud mental». En definitiva, que no da igual comer cualquier cosa y que si ya lidiamos con un problema de salud mental, es preferible eliminar los alimentos ultraprocesados de nuestra dieta, explica.
ASÍ AFECTA AL CEREBRO EL CONSUMO DE COMIDA BASURA
Por su parte, otro estudio español realizado por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) en colaboración con el Instituto de Investigación Biomédica de Girona, ha encontrado una asociación directa entre el consumo de alimentos ultraprocesados y los síntomas depresivos. Al parecer, los alimentos ultraprocesados parecen afectar al volumen de sustancia gris en el circuito cerebral mesocorticolímbico, incluyendo la amígdala y las regiones frontales. Estas áreas cerebrales son las encargadas del proceso de recompensa, con un impacto directo en la toma de decisiones, incluidas las relacionadas con la alimentación. Además, el estudio también exploró los efectos de la obesidad y los niveles de inflamación en la asociación entre el consumo de ultraprocesados y los síntomas depresivos. Estudiando los niveles de glóbulos blancos, se descubrió que la asociación entre ambos era particularmente significativa en personas con obesidad, lo que sugiere que la presencia de inflamación periférica podría influir en los efectos negativos de estos alimentos en la salud mental.
Telva