Bajo Escrutinio: Vacunas y Pandemia
Por Rolando Hernández
Recuerdo que el viernes 13 de marzo del pasado año fue el último día que estuve de manera presencial con los estudiantes y el personal del centro educativo en el cual trabajo en el Estado de Nueva Jersey. El virus Sars-Cov-2 conocido como el coronavirus se había diseminado de manera agresiva dentro y fuera de Estados Unidos.
A pesar de que en noviembre del 2020 se habían detectado los primeros casos, la enfermedad continuó con su letal avance.
Las primeras semanas fueron difíciles, porque el ritmo de vida de todos cambios de manera drástica de la noche a la mañana. Todos, los afectados, tuvimos que adaptarnos a una nueva forma de trabajo desde nuestros hogares. Otros fueron a parar a las filas de los desempleados donde aún permanecen.
Millones de personas han tenido que hacer lo imposible para sobrevivir, en particular en las naciones donde sus ciudadanos no cuentan con una protección del estado.
La parálisis social era evidente, porque nos enfrentábamos a un enemigo desconocido e invisible, pero que hoy día tenemos más conocimiento sobre esta terrible enfermedad cuyos primeros casos fueron detectados en la ciudad de Wuan, China que en la actualidad está siendo estudiada por la comunidad científica para determinar el origen y aparición del virus que ha provocado la enfermedad.
En todo este tiempo hemos tenido que redefinir nuestras vidas en lo personal y familiar. La prueba no sido nada fácil, porque hemos vivido prácticamente aislados para mantener la distancia social que se ha demostrado que evita contraer la enfermedad, y porque hemos perdimos seres queridos.
Sin embargo, la realidad es que, en la actualidad a pesar de la oposición de muchos para su uso, gracias al avance de la ciencia se cuenta con diferentes vacunas como las de Moderna, Jhonson & Jhonson, y Phizer que de acuerdo a los expertos son efectivas contra el coronavirus.
La vacunación ha sido iniciada a nivel mundial y eso es alentador. Es cuestión de tiempo para eliminar la propagación y presencia de la enfermedad, pero mientras tanto debemos continuar con el uso de las mascarillas, distanciamiento social y la convivencia con los miembros familiares más cercanos. Esa es nuestra misión y no debemos fallar, porque el virus debe ser derrotado.
El autor es un periodista, educador y escritor dominicano radicado en el Estado de Nueva Jersey. Puede ser contactado en: rhernandez5@hotmail.com