Centro Cultural Banreservas ofrece en octubre cinco películas clásicas imperdibles
Serán proyectadas gratis Los dioses deben de estar locos, Un rostro en la multitud, Los niños del cielo, Muerte de un ciclista y Cinema Paradiso.
El Centro Cultural Banreservas anunció que exhibirá los martes de octubre películas clásicas internacionales, en funciones gratuitas, consideradas por la crítica internacional como “imperdibles” por la calidad y los esquemas novedosos y creativos que establecieron.
Las películas a ser exhibidas en el auditorio del CCBR, son: Los dioses deben de estar locos, Un rostro en la multitud, Los niños del cielo, Muerte de un ciclista y Cinema Paradiso, con la moderación posterior del asesor en cine del CCBR, Rienzie Pared Pérez.
Mijail Peralta Rodríguez, gerente de Cultura del Banreservas, informó que las funciones inician a las siete de la noche en el auditorio (que tiene número limitado de asientos), por lo que recomienda al público reservar llamando por teléfono 809-960-2121 o por el correo electrónico centroculturalbanreservas@banreservas.com.
El Centro Cultural Banreservas está ubicado en la calle Isabel La Católica # 202 de Ciudad Colonial, con facilidad de parqueo gratuito al lado de la institución.
Las proyecciones inician el martes 3 con Los dioses deben de estar locos (The gods must be crazy), del director Jamie Uys, (1980) con la historia de Xi, su familia y su tribu de bosquimanos, viendo felices en el desierto del Kalahari, hasta que un día una botella de vidrio clásica de Coca-Cola cae desde una avioneta que sobrevolaba el lugar y cree que cree que este extraño artefacto es otro “regalo” de los dioses y le dan múltiples usos.
El martes 10 se proyecta el drama norteamericano de 1957, Un rostro en la multitud (A face in the crowd), del director Elías Kazán, que se adelantó a su tiempo, al plantear la transformación en figura mediática de un vagabundo que fue entrevistado de casualidad en una radio local y se transformó – por su estilo inusual y la singularidad de su voz- en una figura de la televisión de su tiempo. Fue el precedente de muchas películas de hoy día, basadas en ese esquema.
El martes 17, se proyecta Los niños del cielo del director iraní Majid Majidi, una historia cotidiana tan simple centrada en dos hermanitos, que un buen día pierden un zapato escolar. Ese hecho es manejado como es referencia en las escuelas de cine sobre temática con un grado extremo de gestión audiovisual.
Las proyecciones siguen el martes 24, con Muerte de una ciclista, producción española de 1955, a cargo del director Juan Antonio Bardem.
La crítica internacional califica este singular drama de incomunicación, en el cual una joven dama de la burguesía madrileña, y su amante, Juan, atropellan accidentalmente a un ciclista y cuando se detienen para comprobar su estado. Juan se acerca al moribundo, se agacha y dice: “Está vivo”, pero lo abandonan.
Atormentados por el remordimiento y el miedo, que les perseguirá a cada momento hasta que descubren que nadie sabe nada de lo sucedido. Es un reflejo del enfrentamiento entre lo ético, los protocolos sociales y la conciencia que manda al buen actuar.
Finalmente, el martes 31, se presenta Cinema paraddiso, de Giusseppe Tornatore, evocación poética y mágica de la fuerza del cine en un niño.
Se trata de una de las odas fílmicas mejor logradas al seducir con sonidos e imágenes en la fuerza que solo el cine puede lograr en almas sensibles y el impacto de este arte en la imaginación, el recuerdo y la magia del vivir muchas vidas.