CIMTRA realizó conversatorio con la finalidad de lograr un convenio internacional con la OIT, y su ratificación a nivel nacional contra la violencia de género
Santo Domingo.- El Comité Intersindical de las Mujeres Trabajadoras (CIMTRA) realizó hoy un conversatorio para concientizar a las mujeres trabajadoras y adoptar compromisos a fin de lograr un convenio internacional de la OIT y su ratificación a nivel nacional contra la violencia de género en el mundo del trabajo, en el Instituto de Formación Agraria y Sindical (INFAS).
Con motivo de la conmemoración del Día Internacional de la No violencia contra la Mujer, CIMTRA convocó la asistencia del público en general para también “reflexionar sobre la situación de violencia que padecen las mujeres en la sociedad, sus repercusiones en el ámbito laboral y establecer niveles de compromisos para contribuir con la erradicación de la violencia”.
La actividad tuvo también como finalidad, promover la aplicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), en un espacio de acción propositiva y reivindicativa de lucha, para la erradicación de la discriminación y la violencia contra la mujer en todas sus manifestaciones, así como reafirmar la postura de organizaciones para impulsar un convenio ante la OIT que busca acabar con la violencia y el acoso en el mundo del trabajo y que deberá ser firmado por gobierno, trabajadores y empleadores.
En el marco de un programa nacional e internacional financiado por la ONG Belga Solidaridad Mundial (WSM) e ISCOS bajo el marco del proyecto Más Sindicato, y participaron las organizaciones: CNUS, CNTD, y bajo la Red Nacional por el Derecho a la Protección Social compuesta por CONAMUCA, MOSTCHA, FEI y AMUSSOL y CASC así como otras organizaciones sociales nacionales e internacionales que acompañaron el proceso y la concientización de la ciudadanía sobre la violencia, el acoso y otras situaciones que viven las mujeres en la actualidad.
SOBRE LA SITUACIÓN ACTUAL DE LAS MUJERES EN EL PAÍS
Las mujeres dominicanas, se han ido incorporando de manera sostenida al mercado laboral, pero todavía existen grandes brechas de género, en el 2012 el desempleo femenino era 21.5% en contraste con el masculino de 10.1%.
En el caso de las mujeres jóvenes de 15 a 29 años, el desempleo era de un 39.3% en comparación un 18.8% de los hombres. Muchas Mujeres al tener hijos no regresan al mercado laboral y pierden años de aportes de pensión por elegir cuidar a sus hijos, disminuyendo la remuneración final que recibirá al ser pensionada y esto, también es un acto de violencia por falta de políticas que promueva una estrategia para que las mujeres no pierdan esos años de aporte.
Solo el 22% de las mujeres empleadas lo está en trabajo profesional, técnico o de gerencia; un 14.8 % como oficinista; un 33% en ventas y servicios; un 5.5 % en manual calificado; un 8.4% manual no calificado; un 15.2% en trabajo doméstico y un 0.3% en agricultura. Esto indica una inserción laboral en trabajos con condiciones más precarias, salarios más bajos, fuera de cobertura de la seguridad social, con mayor nivel de informalidad y menos estables.
La ENDESA 2013 muestra, que de las mujeres con un empleo remunerado el 29.3 % ha sufrido violencia física alguna vez en su vida; mientras que para las desempleadas es un 21%. Igualmente, el 11% ha sufrido violencia sexual en contraste con 8.5% de las mujeres desempleadas.
En el caso de la violencia doméstica el 34% de las mujeres empleadas con remuneración ha sufrido violencia emocional por parte de su compañero o esposo. El 42% de las mujeres trabajadoras remuneradas manifiesta que su esposo se pone celoso o se enoja cuando ella habla con otros hombres; el 19% indicó que frecuentemente la acusa de infiel; el 27% expresó que no le permite reunirse con sus amigas; el 11 % manifestó que trata de limitarle el contacto con la familia: 35% dijo que todo el tiempo insiste en saber dónde ella está; el 26% dijo que no confía en ella para el manejo del dinero, y el 29 % señaló por lo menos tres de esos controles.
Solo el 40% de las trabajadoras en situación de violencia buscó ayuda y el 29.5% nunca buscó ayuda ni le contó a nadie su situación de violencia. Por otro lado, el acoso sexual laboral está débilmente sancionado, y sin políticas efectivas para su prevención.
Fuente: Externa