¿Cuál es tu legado?
Las Huellas de Jesús
Horacio Mejía Suárez
Legado, esta palabra se define como la cosa material o inmaterial que se deja en testamento o se transmite a los hijos de generación en generación. Es necesario tener claro que grandes figuras y personas a lo largo de la humanidad han procurado establecer un legado apoteósico y así inmortalizar sus nombres, es una de las grandes ambiciones humanas muy presente en personas que de alguna manera u otra ejercen algún tipo de liderazgo que por la anterior precisa ambición procuran como trampolín de su propósito. Es bastante beneficioso y potable para todos que se levante gente que quiera marcar la historia. Es arduo y difícil el trayecto que es necesario recorrer para lograr algo como esto.
La palabra de Dios nos muestra como hombres como José, hijo de Jacob quien pasó luego a ser Israel, este hombre estuvo en una cisterna, fue vendido por sus hermanos a los ismaelitas por veinte piezas de plata, en Egipto fue encarcelado injustamente por algo que podría considerarse totalmente una trampa, pero este hombre había sido predestinado por Dios para cosas grandes y favorables. Con la interpretación certera de un sueño se convierte en la segunda persona más importante de todo Egipto, no por sus propias capacidades, sino porque el Señor estuvo con José, gobernador de Egipto, a pesar de ser hebreo.
Este hombre mientras vivió fue señor de sus hermanos y hubo reconciliación entre ellos, pero cuando el Faraón de Egipto tiene un sucesor el cual no tenía relación, amistad, ni empatía con José, los hebreos que habitaban en tierra donde eran forasteros fueron tomados por esclavos, pero ya el legado había sido escrito, este hombre ya era un hito histórico ¿Sabes en qué debes ser como José? Así como sus restos al el morir fueron puestos en un ataúd en Egipto, pero no fue sepultado, sino que sus huesos cruzaron el mar rojo con Israel, así mismo lo que quede de ti cuando partas de esta tierra no será para memoria del mundo (que es lo que representa Egipto), sino que será un legado para edificación y testimonio del pueblo de Cristo, cuyo principio debe ser la santidad del Señor y que quede claro que la Gloria es suya.
Emula a José para que tu legado produzca mejoría a las generaciones venideras, conserva el amor que es parte del fruto del Espíritu aunque te arrojen piedras los perversos para dañarte, no temas a como vas a ser llamado, mejor atiende otro llamado, el de Dios, quien se encargará de exaltarte por tu constante integridad y aderezará mesa para ti en presencia de tus angustiadores, no seas vencido de lo malo, sino que vence con el bien al mal, comienza a escribir tu legado.
Horacio Mejía Suárez.
Coach/Cristiano
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