La Bienal Internacional de Arquitectura y Urbanismo de República Dominicana premia la
Culminemos con la violencia en el tránsito
Yanira Fondeur
Promoviendo la Paz
Conocer de la muerte trágica de una amiga, de corazón colmado de nobleza, la cual al momento de abrir la puerta del carro de su nuera fue embestida a una alta velocidad por un irresponsable motorista quien le causó inmediatamente la muerte, un hecho luctuoso que me dejó en estado de shock junto a mi familia.
La consternación de esa tragedia me hizo reflexionar una vez más que la vida es sólo el presente, porque el futuro no sabemos si va a llegar en una sociedad tan violenta.
También he pensado en cuantas muertes más tendremos que soportar por la falta de cumplimiento y sanción de las disposiciones legales en el tránsito vehícular.
Lamentablemente, como sociedad hemos normalizado que, aún con la luz roja del semáforo los motoristas no la respeten y crucen las vías sin medir consecuencias.
Ahora le tocó partir abruptamente a Altagracia, pero cuantos hombres y mujeres no han sufrido la misma desgracia, dejando un vacío inmenso en el corazón de tantas familias y sus relacionados.
Sin duda alguna creo que es imposible convivir en paz en medio a las violaciones constantes del tránsito y la seguridad víal, las cuales cuando no traen una tragedia irreparable, nos causan graves perjuicios en el normal desenvolvimiento de nuestras actividades cotidianas, dado el tiempo que perdemos en los atascos y tapones.
Entendemos que, los ciudadanos que no respetan las normas de la ley 63-17, que regula y supervisa la movilidad, el transporte terrestre, tránsito y seguridad vial en el país, merecen ser sancionados acorde con el régimen de consenccuencias, sin distinción alguna.
No es de justicia provocar una muerte por una irresponsabilidad en el manejo de un motor u otro vehículo y esto quede sin consecuencias que trasciendan ejemplarizadoramente. En este caso, estamos hablando de destruir una vida que es madre, hija, abuela, amiga y ciudadana ejemplar.
Junto a esa violencia, constatamos la violencia verbal de los conductores por cualquier incidente mínimo. La ira se apodera de algunos ciudadanos que por el simple roce y facilmente sacan un arma de fuego y disparan sin más ni más.
Es por ello que, somos partidaria de que se hace necesario que aprendamos a reconocer las emociones y a regularlas, sabiendo que el diálogo se impone siempre para dar solución eficaz a una desavenencia.
Merecemos transitar en paz, merecemos llegar sanos a nuestros hogares, merecemos tener seguridad vial, merecemos una vida libre totalmente de violencia.
La autora es la presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia.
@Yanira_Fondeur