Día de la Virgen de Fátima: cuál es su historia y cuáles fueron sus tres profecías
Como sucede todos los años, este 13 de mayo se celebra el Día de la Virgen de Fátima para recordar su primera aparición en Cova da Iria, en Portugal, en 1917.
Aquel día, la Virgen se les presentó a Lucía y a sus primosFrancisco y Jacinta Marto. Los pequeños cuidaban los rebaños de sus familias y vivían en el pequeño pueblo de Aljustrel, en Fátima.
La historia de la Virgen de Fátima
El 13 de mayo de 1917, los tres pastorcitos vieron un relámpago en un día radiante. Mientras resguardaban a sus ovejas, observaron una nube sobre la que una mujer se encontraba parada y rodeada por un resplandor que parecía venir del sol. En sus manos sostenía un rosario de cuentas brillantes como perlas y una cruz de plata.
Lucía y Jacinta podían verla y oírla; Francisco sólo podía verla
La Virgen de Fátima se les apareció a los pastorcitos, por primera vez, el 13 de mayo de 1917.
Desde esa primera vez hasta el mes de octubre, la Virgen se les apareció a los pastorinhos los días 13 de cada mes y les dejó sus tres secretos o profecías a los pequeños.
Francisco y Jacinta Martos murieron poco después; Lucía Santos fue la encargada de transmitirlos al mundo.
Cuáles fueron las tres profecías de la Virgen de Fátima
Los tres mensajes que dejó la Virgen de Fátima fueron considerados premonitorios y, de acuerdo al Vaticano, su contenido ya se cumplió.
San Juan Pablo II sostuvo que las visiones de la Virgen de Fátima eran “revelaciones privadas cuyo propósito es ayudar a vivir más plenamente de acuerdo a las enseñanzas de Cristo”.
La primera de las profecías se vincula con la Revolución Rusa. Era 1917 y desde febrero en ese país estaban ocurriendo acontecimientos que terminaron con la Revolución de octubre y, luego, la conformación de la Unión Soviética.
Otra profecía hablaba de nuevos tiempos bélicos una vez que terminara la Primera Guerra Mundial (que en ese momento se estaba llevando a cabo y finalizó en noviembre de 1918) y adelantaba la Segunda Guerra Mundial.
El último secreto se vinculaba al Papa San Juan Pablo II y anticipaba el atentado que sufrió el Sumo Pontífice el 13 de mayo de 1981, cuando le dispararon en la Plaza de San Pedro.
Fue el mismo Juan Pablo quien aseguró haber sobrevivido al ataque gracias a la intercesión de la Virgen María y a la profecía de la Virgen de Fátima que adelantó que eso iba a suceder.
Virgen de Fátima: qué es el «Milagro del Sol»
El 13 de octubre de 1917 tuvo lugar la sexta -y última- aparición de la Virgen de Fátima. En ese momento, sucedió un fenómeno tan místico como mágico: el «Milagro del Sol».
Todo sucedió al mediodía en localidad portuguesa de Cova da Iria frente a Lucía, Francisco y Jacinta y miles de peregrinos que se habían acercado a ver a la Virgen. Habían anunciado que aparecería y produciría un milagro.
El día amaneció feo. De hecho, llovía torrencialmente. Así llegó el mediodía y no pasaba nada. Todo era espera. De acuerdo a los diarios de aquel tiempo, había 40.000 personas en el lugar. Todos estaban empapados.
De repente, Lucía ordenó que guardasen los paraguas. Giró, y a Francisco y a Jacinta les avisó: “Ya viene Ella, he visto el resplandor”. La lluvia de golpe paró y el cielo se despejó totalmente.
Cuando la Virgen apareció, brillante, le habló directamente a Lucía, cuenta José María Zavala en El secreto mejor guardado de Fátima.
«Decidles que hagan aquí una capilla en mi honor; que soy Vuestra Señora del Rosario; que continúen rezando el Rosario todos los días. La guerra va a terminar y los soldados volverán pronto a sus casas», dijo anunciando, también, el final de la Primera Guerra.
Luego el Sol empezó a girar sobre sí mismo, como si fuera una rueda de fuego, al tiempo que esparcía hacía todos lados resplandores multicolores.
Minutos más tarde, se detuvo para volver a reanudar su increíble danza casi de inmediato, como si fuese a desprenderse del cielo y a caer sobre la multitud.
Atónitos y asustados, muchos de los presentes cayeron de rodillas para rezar o gritar hasta más no poder.
En ese mismo lugar, poco después, en 1920, se construyó una capilla. Actualmente es el famoso Santuario.
La oración a la virgen de Fátima
Oh Virgen Santísima, Vos os aparecisteis repetidas veces a los niños; yo también quisiera veros, oír vuestra voz y deciros: Madre mía, llevadme al Cielo. Confiando en vuestro amor, os pido me alcancéis de vuestro Hijo Jesús una fe viva, inteligencia para conocerle y amarle, paciencia y gracia para servirle a Él a mis hermanos, y un día poder unirnos con Vos allí en el Cielo.
Padre nuestro, Avemaría y Gloria.
Madre mía también os pido por mis padres, para que vivan unidos en el amor; por mis hermanos, familiares y amigos, para que viviendo unidos en familia un día podamos gozar con Vos en la vida eterna.
Padre nuestro, Avemaría y Gloria.
Os pido de un modo especial por la conversión de los pecadores y la paz del mundo; por los niños, para que nunca les falten los auxilios divinos y lo necesario para sus cuerpos, y un día conseguir la vida eterna.
Padre nuestro, Avemaría y Gloria Oh Madre mía, sé que escucharás, y me conseguirás estas y cuantas gracias te pida, pues las pido por el amor que tienes de tu Hijo Jesús. Amén.
¡Madre mía, aquí tienes a tu hijo, sé tu mi Madre!
¡Oh dulce Corazón de María, sed la salvación mía!
Fuente de la oración: Devocionario.com
El Clarín