El camino al cambio en las organizaciones

Desde mi Perspectiva
Alliett Ortega

Esta semana en desde mi perspectiva hablaremos del cambio, el cual es lo único seguro por el que todos pasamos y todos los días. Para adaptarnos a los cambios nos corresponde también cambiar nosotros. ¿Pero cómo sobrevivir cuando las variaciones son bruscas o inesperadas? Transformarnos quiere decir dejar a un lado quiénes hemos sido hasta ahora y afrontar lo que debemos cambiar. Hay que superar miedos, mirándolos de frente, replantear ideas, conceptos, transformar objetivos, y hasta comportamientos.

Para manejar el cambio debemos de cultivar el optimismo, y es que hay muchas razones para hacerlo, ya que para reinventarnos o reinventar, que no es más que cambiar debemos enfocarnos en lo que se desea y desarrollar mensajes de aliento que den fuerza y confianza, tanto a nivel personal como en las organizaciones, repetirlos frecuentemente: “necesito cambiar; voy a esforzarme por hacerlo; y si insisto lo más seguro es que acabe teniendo éxito”.

Es necesario evaluar constantemente y tener claro la estrategia, preparar un plan con disciplina y consistencia, las relaciones es otro punto es fundamental en nuestros días, crear esos círculos de apoyo nos apoyan en el cambio.

En cuanto al cambio en las organizaciones podemos decir que se tomas en cuanta los siguientes aspectos para encaminarse a la meta del cambio a lograr:

• Aclarar y definir las labores del personal, y la relación que existe entre estos.
• Definir áreas de responsabilidad y autoridad.
• Establecer cadenas de mando.

Pero no dejemos de lado que siempre existirá la resistencia al cambio “es un fenómeno individual, una reacción normal del ser humano”, esta resistencia puede tener puede ser origen en varios aspectos como:  Malas experiencias anteriores, No aceptar la realidad, Percepción selectivas, Desconfianza, Recelo, Inseguridad personal, Necesidad de evitar la ansiedad, Dependencia, Contra dependencia, Miedo a lo desconocido, Falta de claridad en los objetivos.

Frente a la resistencia al cambio es conveniente intercambiar o confrontar tanto opiniones como percepciones, organizar reuniones estructuradas donde se expresen los sentimientos y las emociones, siempre mantener informaciones que aclare pensamientos y emociones irracionales, y lo más importante involucrar, en la medida de lo posible, a los participantes en el diagnóstico de la situación, decisión y planeación de actividades de cambio.

Es por esto que hoy más que nunca en las organizaciones se requiere de agentes del cambio que tienen a su cargo las siguientes tareas básicas:

• Ayudar a generar información precisa.
• Estimular las decisiones libres y bien informadas.
• Asegurar un compromiso responsable de la gente que participa en el cambio.
• Desarrollar los potenciales y recursos del sistema cliente.
• Coordinación, compromiso y competencia

Para lograrlo el agente, y la organización debe procurar el desarrollo de las siguientes habilidades:

• Autoconocimiento que no es más que la conciencia realista de capacidades, limitaciones, motivación, valores y actitudes.
• Comprensión de la organización, tener conocimientos teóricos del negocio, experiencia en el trabajo y capacidad de diagnóstico.
• Manejo de relaciones humanas, lo cual permite crear un clima de confianza, apertura, respeto y colaboración.
• Flexibilidad, que es la capacidad para representar distintos papeles según las necesidades del programa de cambio.

Una vez que los gerentes han decidido que es necesario el cambio, pueden echar manos de diversos métodos para concretarlo. Existes cuatros métodos principales para generar el cambio en una organización, aunque a continuación voy a describir a cada uno por separado, es importante recalcar que la mayor parte del esfuerzo de cambio organizacionales se asocia a una combinación de estos métodos, y poca vez una transformación significativa se basa solo en unos de ellos.

Método basado en la tecnología: cuando una organización elige un método basado en la tecnología para generar el cambio, concentra la atención en los flujos de trabajo, los métodos de producción, los materiales y los sistemas de información.

Método de rediseño organizacional: destaca los cambios estructurales internos: rediseñar departamentos, reasignar la toma de decisiones y funcionar o reorganizar a los departamentos que venden los productos en la empresa.

Método basado en la tarea: se concentra en modificar las responsabilidades y tareas laborales del empleado. Siempre que cambia un puesto ya sea por nueva tecnología o por un esfuerzo del rediseño se transforma las tareas.

Método orientado a la persona: incluye una amplia gama de actividades ideadas para mejorar las competencias, actitudes y niveles de desempeños individuales. La tecnología, el diseño y los métodos orientados a las tareas se emplean para mejorar el desempeño organizacional, modificando la forma en que se realiza el trabajo. En contraste, los modelos orientados a las personas se utilizan para crear un cambio organizacional, concentrándose en modificar las percepciones, actitudes, competencias y expectativas de los empleados.

Hasta una próxima entrega.