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El impacto del cigarrillo en la piel
Tendencias Dermatológicas
Doctora Yasmina Almodóvar
El consumo de tabaco o cigarrillo está relacionado con patologías graves como: El cáncer y las enfermedades cardiovasculares y respiratorias pero, también la piel sufre las consecuencias del tabaquismo, no sólo con enfermedades graves, sino también con aquéllas que afectan a su estética.
La piel de la mujer se ve más afectada por el tabaco que la del hombre debido a que es más fina y delicada.
La nicotina eleva los niveles de vasopresina, una hormona que estimula la contracción de las fibras musculares, aumenta la presión sanguínea y disminuye los estrógenos en mujeres, lo que favorece la aparición de sequedad y atrofia cutánea, además de la posibilidad de la aparición de vello. Asimismo, disminuye la absorción de la vitamina A y por ende los niveles de la misma, produce cambios en la cantidad y calidad del colágeno y la elastina, y provoca disminución de fibroblastos y acortamiento de capilares.
Por esto el consumo de tabaco produce alteraciones en la piel tales como:
- Arrugas marcadas, y de aparición prematura.
- Manchas amarillentas en los dedos.
- Olor en la piel a tabaco.
- Aspecto facial demacrado con prominencia de los huesos.
- Apariencia grisácea de la piel.
- Manchas color marrón oscuras o violáceo en la cara.
- Dientes con manchas amarillentas.
Y es que, el humo del tabaco afecta negativamente a la piel de dos formas: el aire contaminado con humo seca la piel y fumar reduce la cantidad de flujo sanguíneo que llega a ésta, lo que la priva de oxígeno y otros nutrientes esenciales y provoca deshidratación en la superficie cutánea. Por lo que esto conlleva mala cicatrización de heridas.
El tabaco daña el cabello haciéndolo más delgado y por ende más débil. Lo peligroso de esto es que afecta los folículos pilosos teniendo los fumadores más probabilidades de padecer calvicie.
La nicotina que contienen los cigarros es altamente dañina para las fibras y el tejido de la piel, con esto la piel pierde su elasticidad y su docilidad, dando como resultado estrías en la piel, además de una piel flácida sobre todo en el área del abdomen.
Un trabajo publicado en la revista “Archives of Dermatology” plantea que el tabaco afecta también a las zonas de la piel que no están expuestas a la radiación solar, y que el grado de envejecimiento prematuro depende de la cantidad que se fume diariamente.
Hoy en día existen múltiples tratamientos disponibles para el envejecimiento cutáneo, pero la prevención de la exposición a agentes exógenos causantes de daño a la piel siempre será lo primordial.
Estoy para servirles y aclarar sus dudas, en el centro Dermatológico Dra. Almodóvar a los teléfonos: 849-294-7475 / 829-656-8989 / 809-591-7475 Dra.Almodovar@hotmail.com
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