Feng Shui de la abundancia: 6 hábitos que debes evitar en la cocina
Cómo mantener la energía de la cocina en pleno funcionamiento positivo y sin distorsiones, según el Feng Shui.
Hay quienes comparan la cocina con un lugar de alquimia donde perderse entre recetas, aromas y exploraciones sensoriales. Para otros, la cocina puede ser un lugar de paso y hasta caótico, pero ineludible. En este ambiente de la casa saciamos la sed, el hambre, pero también otras cuestiones más profundas que van de la mano de los alimentos.
Para el Feng Shui, en la cocina se ven reflejados aspectos vitales que atraviesan a todo ser humano y a cada familia en particular. Este ambiente de la casa habla de la capacidad de sus habitantes para ser prósperos, muestra mandatos y formas de abordar la ganancia del dinero, habla de los vínculos familiares, y también revela estados de salud.
¿Cómo se siente?, ¿hay cosas dando vueltas?, ¿encuentran fácilmente lo que necesitan? A la hora de preparar los alimentos, ¿se sienten a gusto?, ¿dan ganas de compartir allí una sopa humeante?, ¿a qué huele tu cocina? “Así como es adentro es afuera”, proclama una máxima del Feng Shui, pero también esta disciplina milenaria nos invita a modificar aspectos internos armonizando las energías del entorno.
Aquí, algunos hábitos frecuentes que se instalan en las cocinas y que vienen a reflejar algunas problemáticas vigentes en el hogar. La propuesta es poder detectarlos para reflexionar sobre aquello que están significando, para luego con intención consciente cambiarlos por hábitos positivos. Verán que son cosas sencillas de la vida cotidiana, pero no por eso leves.
A veces lo simple parece no tener tanta influencia o peso, sin embargo, cambiar ciertos hábitos diarios puede dar muchos beneficios:
Alimentos vencidos y frascos vacíos
Pasar por alto la caducidad de los alimentos o no renovar los contenidos nos muestra una energía que no es beneficiosa. Principalmente, tenemos que cuidar que los alimentos no estén vencidos, en mal estado o con gorgojos. Si los frascos se quedan semivacíos hay que retirarlos o hay que volver a llenarlos.
La cocina es particularmente un lugar para vivenciar la prosperidad del universo: una fuente con frutas frescas en la mesada, los frascos plenos con legumbres o semillas, las latas con galletas dan sensación de abundancia y con ello trasmitimos esta idea al universo creador.
Desorden y un poco de todo
Revistas, facturas vencidas, remedios y demás. Si sos de acumular estos rubros en la cocina cabe preguntarse por qué los objetos ajenos a la nutrición están invadiendo el área. Luego, hay que retirarlos.
Las facturas vencidas nos recuerdan deudas cada vez que las vemos sobre la heladera, es ideal colocarlas en algún cajón y sacarlas cuando es el momento de pagar.
Acordarse de tomar los remedios puede ser una tarea tediosa si tenemos muchas ocupaciones, pero no debemos caer en la tentación de dejarlos sobre la mesada. Se pueden guardar en la alacena y hacer un recordatorio con una alarma.
Estas cosas, además de entorpecer el orden y el Qi, están mostrando preocupaciones que invaden la energía de la nutrición y la productividad. Entonces, cada cosa en su lugar, y así mejoramos la productividad y la salud.
Mejorar el flujo energético
Sartenes y cacerolas, así como cucharones y demás, entorpecen el flujo energético que debería circular sin obstáculos, suave y envolvente. El hábito de exhibir objetos punzantes como cuchillos o cuchillas emiten un Qi desfavorable cuando están a la vista, representando temas de discusiones y malestar.
Hay que tener las cosas en espacios de guardado (armarios, cajones, canastos o estantes). Así ganamos terreno para cocinar, reducimos contaminación visual, facilitamos la limpieza de las superficies y mejoramos la calidad ambiental.
No acumular
Otro hábito nocivo para el Qi de la abundancia en la cocina es la acumulación de cosas. Se juntan por un sentimiento de escasez, por un miedo -irracional pero fundamentado desde el inconsciente- a llegar a necesitarlos algún día y no poder adquirirlos.
Siempre es bueno soltar para que lo que no usamos pueda ser aprovechado. Electrodomésticos que esperan una eterna reparación son otros de los responsables de estancar el Qi de la abundancia, así como vajillas rotas. Cuando saques estas cosas del medio, conservar el orden será un placer.
Heladeras, siempre limpias
Las heladeras que no se mantienen limpias y en buen estado están representando descuido de los recursos que nutren. La heladera conserva nuestros alimentos, por eso debe estar limpia y en buen funcionamiento, pero además al abrirla hay que tener la experiencia de ser provistos por su contenido.
No la dejes «pelada». Mantené la heladera con frutas y verduras frescas, botellas llenas, comida casera en buen estado y no dejes que se acumule suciedad.
La gotita que rebasa
¿Quién no ha tenido esa canilla a la que se deja gotear y gotear? Las pérdidas de agua, teniendo en cuenta que la casa es la representación de nuestro mundo interior, están simbolizando alguna emoción o miedos que han quedado sin expresar conscientemente.
Las emociones que no se pudieron gestionar correctamente se expresan en la vivienda con pérdidas de agua y humedades. Es fundamental reparar estas averías a la brevedad.
Cómo proteger la productividad y la armonía
Por último, hay que considerar un aspecto energético que no tiene que ver con los hábitos diarios, sino con la distribución de los artefactos en la cocina. El fuego y el agua son los elementales que predominan en la cocina y hay que evitar que entren en conflicto.
Las canillas deben siempre estar al menos a unos 70 centímetros de distancia del horno; de lo contrario, puede mostrar discusiones de pareja (cuando el agua apaga el fuego se vincula con discusiones) o afectar la fortuna. Para contrarrestar este efecto, podemos ubicar una planta en el medio de las dos energías y así restaurar la armonía de los elementos.
Cuando arriba de la cocina se encuentra ubicado un baño también será causante de problemas de parejas, lo ideal es poner una planta en el baño para contrarrestar el desequilibrio. Por otro lado, si arriba de las hornallas hay una ventana, debemos colocar cortinas para evitar la huida del Qi. El Feng Shui advierte que la energía productiva no se fugue por la ventana.
Una cocina despejada, alacenas ordenadas y limpias, especias y frutas a mano, aromas a café y pan horneado ayudarán a que el Qi de la prosperidad se expanda.
El mejor color para la cocina es el blanco por que permite reflejar la luz y conservar la higiene. Decorar con algunas frases positivas las paredes o cuadros de colores cálidos y alegres dará a este espacio la calidez necesaria para disfrutar la preparación de los alimentos.
En el Feng Shui se dice que la cocina es el corazón de la casa, hagamos entonces que bombee emociones nutricias y positivas.
Fuente: Clarin