Haz que los días cuenten
Yanira Fondeur
Promoviendo la Paz
Sabemos que son tiempo difíciles para las familias que han perdido a un ser querido o lo han tenido que hospitalizar sin poder acompañarle así como para quienes no pueden controlar el miedo, la ansiedad y la angustia durante este período de cuarentena.
Si tienes en tu hogar casi un mes, pero a cambio gozas de salud, en lugar de lamentarte constantemente por el aislamiento social dispuesto por las autoridades sanitarias en prevención del coronavirus, debes comenzar a reconocer y valorar que cuentas con la mayor bendición que puede tener un ser humano en estos tiempos.
Desde este espacio de promoción de paz, quiero trasmitirle mi deseo de que descontinuemos la práctica de contar el tiempo que llevamos de cuarentena y en su lugar vamos a mantener renovados nuestros pensamientos y hacer de cada día una oportunidad única y especial.
Hacer que cada día cuente, es una responsabilidad individual que nos ayuda a mantener en control las emociones negativas que recibimos al saber la cantidad de fallecidos e infectados en nuestro país y el mundo.
Hacer que cada día cuente, es trabajar en tu ser, en tu paz interior, en razón de que no podemos dar a los demás lo que no tenemos ni podemos controlar.
Hacer que cada día cuente, es renacer en la fe, sin importar que religión o creencia tengas, es tener la certeza que el todopoderoso no nos envía nada que no podamos soportar.
Hacer que cada día cuente, es estar consciente de que lo único que tenemos seguro es el hoy y que siempre debemos dar lo mejor de nosotros/as.
Hacer que cada día cuente, es no encerrar nuestros pensamientos en el por qué sino en cuál es la finalidad de esta crisis mundial sanitaria.
Hacer que cada día cuente, es valorar y nutrir lo esencial de la vida que está en el amor a la familia.
Hacer que cada día cuente, es expresar a tus seres queridos palabras de aliento, no de desaliento.
Hacer que cada día cuente, es reconocer que somos seres imperfectos, pero que debemos estimular la fortaleza de los seres que amamos, así como nos regocijamos cuando nos resaltan las nuestras.
Hacer que cada día cuente, es invertir el tiempo en cuidar de nuestro sistema inmunológico, de equilibrar el teletrabajo con la responsabilidad del hogar, en fomentar nuestra cultura con un buen libro, escuchar música o jugar en familia.
Hacer que cada día cuente es practicar la empatía y comunicarte con alguien que sabes que necesita una palabra de consuelo o tiempo de calidad para que se le escuche.
Hacer que cada día cuente, es alimentar nuestro ser, reflexionar sobre nuestras actitudes y reconocer que ahora mismo aunque nos preocupamos por la economía, ni siquiera el dinero resulta más importante que contar con salud y vida.
Hacer que cada día cuente, es reflexionar en el comentario de la hija del presidente del banco Santander, Vieira Monteiro, al escribir en sus redes “Somos una familia millonaria, pero mi papá murió solo y sofocado, buscando algo que es gratis. El aire. El dinero se quedó en casa”.
Hacer que los días cuenten es plantearnos mantener la esperanza de que estos momentos difíciles también pasaran y creceremos como mejor humanidad en la unidad del amor y la paz.
Quedémonos en casa y recordemos la célebre frase del exitoso boxeador estadounidense Muhammad Ali, “No cuentes los días, haz que los días cuenten”.
La autora es la Presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia.
@Yanira_Fondeur