Japón levanta el estado de emergencia en todo su territorio
El país avanza ahora hacia la nueva realidad plagada de precauciones y el objetivo declarado de reactivar su economía
La primera fase de la batalla de Japón contra el coronavirus terminó este lunes cuando su primer ministro, Shinzo Abe, levantó el estado de emergencia en Tokio y otras cuatro prefecturas que todavía permanecían en modo de alerta. Con unos 16.600 infectados y 840 fallecidos a nivel nacional, el país avanza ahora hacia la nueva realidad plagada de precauciones y el objetivo declarado de reactivar su economía, muy castigada por la crisis sanitaria y sus consecuencias globales.
Para combatir la expansión del patógeno, Abe declaró el estado de emergencia en Tokio y otras seis regiones el pasado 7 de abril, una medida que pronto se extendió por todo el territorio. Pero con la situación ya más controlada, el 14 de mayo se relajaron las limitaciones en 39 prefecturas, a las que se sumaron otras tres el jueves pasado. Con el anuncio de hoy, la tercera economía mundial queda libre de restricciones por completo.
En su comparecencia ante la prensa, Abe elogió la capacidad de su país para aplanar la curva de contagios y levantar la declaración de emergencia en solo un mes y medio sin necesidad de imponer las estrictas medidas aplicadas en Estados Unidos o Europa. La normativa nipona, mucho más laxa, tan solo autoriza a los gobernadores provinciales a pedir a sus ciudadanos que no salgan de casa si no es estrictamente necesario, pero sin otorgarles el poder necesario para castigar a aquellos que no sigan sus recomendaciones. “El modelo japonés ha demostrado su fuerza”, resumió el mandatario
Tokio ha sido capaz de controlar la expansión del virus
Pese a las críticas a la tibia respuesta inicial del Gobierno, Tokio ha sido capaz de controlar la expansión del virus con una combinación de rastreo de contagiados y sus contactos, el cierre de lugares públicos, la prohibición de la celebración de eventos masivos y un esfuerzo comunitario por mantener la distancia social y evitar salir en la medida de lo posible. Gracias a ello, el número de nuevas infecciones se fue reduciendo de un pico de unas 700 al día a las pocas docenas de estos últimos días.
Con muchos menos pacientes ahora en los hospitales, las autoridades creen que ya es momento para reducir las restricciones. Aún así, pideron a la población que se mantenga alerta y adopte un “nuevo estilo de vida” en el que primen el evitar los espacios cerrados y abarrotados, llevar siempre mascarilla e impulsar el teletrabajo para evitar la llegada de la segunda ola. “Vamos a tener que aprender a convivir con el coronavirus que nos rodea. Si bajamos la guardia, la infección se extenderá rápidamente”, añadió Abe.
El Gobierno decretará un periodo de transición que marque el regreso a la normalidad de forma paulatina
Para ello, el Gobierno decretará un periodo de transición que marque el regreso a la normalidad de forma paulatina. En primer lugar, volverán a abrir las escuelas, gimnasios, bibliotecas y museos -con aforos limitados-, mientras que los restaurantes podrán cerrar a las 10 de la noche en vez de las 8pm actuales. La liga de beisbol profesional se reanudará el 19 de junio, pero sin espectadores. Finalmente, reabrirán teatros, cines y parques temáticos. Se espera que hacia mitades de junio se introduzca una aplicación que enviará mensajes de alerta a aquellas personas que hayan mantenido contacto con una persona infectada.
Mientras, todos los esfuerzos se centrarán en relanzar una economía cuyo PIB se contrajo un 3,4% en el primer trimestre del año. Pero no será tarea fácil. Por una parte, la industria nipona sigue dependiendo en gran parte de las exportaciones, ahora de capa caída dado las situaciones de confinamiento e incertidumbre que hay en otros mercados. Por otra, su consumo interno también vive horas bajas, afectado por el desplome del turismo y la subida del IVA decretada en octubre del año pasado.
Está previsto que el gobierno de el visto bueno a un segundo paquete de ayudas económicas similar al que ya aprobó en abril
Ante este panorama, está previsto que el gobierno de el visto bueno a un segundo paquete de ayudas económicas similar al que ya aprobó en abril (de casi un billón de euros), por lo que la combinación de ambos representará aproximadamente el 40% del PIB nipón.
El panel de expertos del Ejecutivo estudiará la situación cada tres semanas para comprobar si es necesario instaurar nuevas medidas de control. “No es posible hacer que esta enfermedad infecciosa causada por el nuevo virus desaparezca”, aseguró el ministro de Economía, Yasutoshi Nishimura. “Habrá infecciones esporádicas a partir de ahora. Según esta premisa, es importante expandir la actividad económica al tiempo que se implementan medidas preventivas, y no pasar por alto pequeños brotes antes de que se vuelvan grandes”, añadió.
Fuente: La Vanguardia