La moneda tiene dos caras

Sexos sin Guerras

Driva Cedeño

Siempre que se habla de infidelidad (sobre todo si las engañadas fuimos nosotras) la tendencia es ver a la tercera persona como LA MALA DE LA PELÍCULA, la culpable de que nuestro novio nos haya jugado sucio.

Eso lo pensamos a sabiendas de que para que una infidelidad suceda hacen falta DOS y muy probablemente nuestro amado novio sea el verdadero culpable.

Ahora bien ¿tú eres de las que suele ver a las otras como intrusas que pueden acabar con tu relación o estás clara y sabes que quien alborota la cosa es posiblemente tu novio?

En palabras más sencillas: ¿prefieres hacerte la loca y creer que las demás son las culpables y que tu novio no rompió ni un vaso?

Parece mentira pero hay féminas que pareciera que tienen una gríngola en los ojos y se creen ese cuento de “yo no quería, ella me saltó encima”. “La culpable”, “la bruja”, “la mala”, “la loca”, “la regalada” son algunos de los apodos que le ponemos las mujeres a otras mujeres que sentimos que pueden poner en riesgo nuestra relación o que, de hecho, la están poniendo.

No importa si el tipo es un bandido, pero siempre el aguacero le cae a la otra que probablemente no estuvo consiente del engaño porque ella también resultó ser engañada. Las armas siempre apuntan hacia la mujer y no hacia el hombre.

Lo que pasa es que lamentablemente a veces hay tipas que se ganan el puestico porque de verdad que son descaradas y se ponen a buscar donde no se les perdió nada.

Pero también es cierto que la salida más fácil de muchas mujeres es montarle un carón a la otra en vez de armarle un rollo al novio por estársela buceando tan descaradamente.

Por ejemplo: es como que estés pasando al lado de un tipo cualquiera, él se te quede viendo y entonces llegue la novia hacerte un show porque el novio se te quedó viendo.

Es como loco ¿no?, ¿quién es realmente la mala o el malo? ¿Cuántas veces han llegado a “simpatizar” con una ex de sus novios o con quien hubo en algún momento un affaire?

Obviamente no lo hacemos porque le tienen rabia o ideíta a esa mujer, la pregunta es ¿por qué no le tienen idea a su novio en vez de a ella que a lo mejor ni tiene la culpa? ¿Son de las que defienden a muerte a su novio, lo creen incapaz de romper un plato y por eso siempre la culpa la tienen LAS DEMÁS? Recuerden siempre que,  ¨La moneda tiene siempre dos caras¨.