La música del silencio o del corazón

Pienso y Luego Escribo

Iranna Flaviá Luciano

Soy una fan de larga data de Luis Miguel, por lo que puedo considerarlo uno de mis tres artistas favoritos, que se disputa entre los dos primeros.

Estoy entre el mexicano Emmanuel, y Luis Miguel en el puesto número 1, y por qué no, el príncipe de la canción José José.

A mi lista de canciones y artistas favoritos se suman muchos, por su presentación en escena y buenas líneas interpretativas; otro de mis grandes amores es Julio Iglesias.

Inicié con Luis Miguel porque en una de sus entrevistas en el 2015 dió a la música la mejor definición, él que es un gran conocedor del tema, pero a la vez un apasionado por ese arte, “La música es terapéutica”

Este concepto me dejó pensando, y a la vez dije es cierto, la música es terapéutica, conecta los sentidos, emociona, transporta, viaja en el tiempo, recrea momentos, todo en uno, eso y muchas cosas más puede hacer la música cuando nos dedicamos a sentirla en nuestras vidas.

Por ser tan fanática de Luis Miguel, es que ahora no me pierdo un capítulo de su serie de Netflix cada domingo.

El fin de semana pasado quise ir a mi cine favorito de la ciudad a ver una película, siempre escojo minuciosamente el tipo de película en la que voy a invertir tiempo-tiene que ser interesante, que atrape mi atención.

Viendo la cartelera me encuentro con este genial título La música del Silencio, y no tuve que seguir buscando trailers, ni interesarme por los actores, el hecho de que se tratara de la vida del tenor Andrea Bocelli me bastaba.

Bastante emocionada llego al cine, a tiempo, para prepararme a ver una de las películas que se disputan en la actualidad por mi top 1.

La música del silencio cuenta con la actuación de un actor que respeto, porque literalmente se entra en el personaje, Antonio Banderas, él es quien interpreta al maestro de canto de Bocelli.

La película es como casi la mayoría que ha llegado a la fama en una carrera de resistencia, es perseverancia, es espera, es el incremento de la pasión por cada cosa que hacemos; es esperanza.

En Bocelli me hace admirarlo muchas veces más, porque rompió una vez más el paradigma de la sociedad que entiende que una persona con habilidades diferentes no es  útil ni talentoso, con lo que ha alcanzado ha quedado demostrado que eso no es más que fruto de la ignorancia.

El nombre de esta película fue lo que más llamó mi atención, y me llevó a invertir tiempo de provecho en ella, y en medio de la puesta en escena descubrí su real significado, no hay nada que cueste más trabajo que estar en silencio para conectar con el alma, y a que al hablar o cantar des tus mejores notas.

Pienso y Luego Escribo: El silencio es una de las artes que mejor ejercito, hablar solo cuando es necesario es parte de mi personalidad, he llamado a esta música del silencio, la música del amor.

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