Las Hermanas Mirabal, un vuelo eteno de mariposas por la libertad y derechos de las mujeres
Fernando Quiroz
Director de AplatanaoNews
Ojo de Agua.- El vuelo de mariposas parece sentirse en todo este verde y florecido jardín, donde se fraguaron sueños de libertad que marcaron toda una época y generaciones.
La Casa Museo Hermanas Mirabal reconoce a las heroínas que llevaron como nombres de pila Patria Mercedes, María Argentina Minerva y Antonia María Teresa.
Ellas tres, al igual que su hermana Bélgica Adela (Dedé), nacieron en la sección Ojo de Agua, municipio Salcedo, en una familia acomodada, siendo sus padres el comerciante Enrique Mirabal Fernández y Mercedes Reyes de Mirabal (Mamá Chea).
Patria, Minerva y María Teresa son símbolos universales de la resistencia, de la lucha por la libertad y de los derechos de las mujeres. Su malogrado propósito de oposición y liderazgo en la conspiración para derrocar al dictador Rafael Trujillo Molina llenó de indignación y conmoción el calendario mundial el 25 de noviembre de 1960 cuando luego se supo de su cobarde asesinato. Han pasado 57 años y siguen viva en su jardín, en nuestros corazones.
En principio el régimen simuló un accidente de tránsito donde alegadamente murieron las tres damas y el chofer que le acompañaba, Rufino de la Cruz.
Principio y… ¿fin? Desde muy jóvenes fueron germinando en sus pensamientos las ideas de libertad y democracia. Su indignación crecía ante los abusos y arbitrariedades de la dictadura. Valientes, inteligentes y bellas, ellas, nacidas entre 1924 y 1935, eran mujeres fuera de su época.
Cayeron víctimas de una bestia a los 36, 34 y 25 años de edad, dejando huérfanos, viudos y a una sociedad impactada de dolor.
La Casa Museo de las Hermanas Mirabal es un gran aporte a la historia contemporánea.
Testimonia el esfuerzo y sacrificio de una familia que decidió enfrentar el terror.
La residencia fue construida en 1954, y fue vivienda de la familia desde 1956 hasta el 20 enero de 1981. Fue allí donde las tres hermanas vivieron los últimos diez meses de sus vidas.
La Fundación Hermanas Mirabal abrió el espacio con el concepto de Casa Museo el día 8 de diciembre de 1994. Construida con muros de madera y hormigón, algunos revestidos en piedra, y techos de aluzinc, la edificación posee características arquitectónicas e influencias del estilo antillano y se conserva, en su gran mayoría, en su estado original de principios del siglo XX.
La casa museo está compuesta por áreas sociales y privadas: una galería en forma de L, galería posterior, sala, comedor donde se pueden apreciar vajillas de la familia, así como piezas de adornos originales, algunos bordados e incluso algunas pequeñas esculturas de yeso realizadas por Minerva Mirabal.
En el comedor familiar se observan diversos adornos de la época, así como cuadros y fotografías de la familia; la cocina principal, cocina secundaria, tres habitaciones donde se aprecian vestidos, trabajos de bordado y confección textiles realizadas por la hermanas, utensilios personales… baño, una habitación utilizada para exhibición de objetos y una cocina de servicios en el exterior. Se conservan una amplia variedad de pertenencias de la familia Mirabal Reyes.
Armarios, la larga trenza de María Teresa conservada en un cofre de cristal, vestidos, una máquina de coser, un rosario, una Biblia, crucifijos, carteras, abanico de mano, accesorios, lámpara de kerosene, biblioteca, comedor, cristalería, cuadros de arte, diploma universitario, fotos de matrimonio de Minerva y Manolo, y decoración propia de una residencia de la época.
En el área de comedor, una colección de tazas de café de porcelana de Patria y la especial colección de zapatos en porcelana de Minerva. Además, los cuadros que pintaba al oleo Minerva, y dibujos a carboncillo y lápiz que realizaba Patria.
Se trata de un espacio que sirvió para la intimidad familiar, para conversaciones con allegados e intercambiar ideas sobre sus inquietudes políticas, literarias y artísticas.