Tendencias de la moda que arrasarán esta primavera-verano 2025
Manejamos como somos
Iranna Flaviá Luciano
Pienso y Luego Escribo
Así como andamos por la vida, así manejamos.
Como consecuencia de la pandemia, hemos observado como en los últimos meses se ha ido incrementando el estrés en las personas a la hora del manejar.
Los intensos tapones, más el flujo de personas que hacen poco o nada por cumplir con las normas de las calles hacen inadmisible el conducir.
Los choferes de guagua de los diferentes proveedores de transporte público, sumados a los conductores de carros públicos son en realidad los dueños de la calle.
Estar en un carril y hacer la fila correspondiente es cosa del pasado, es más fácil tratar de tirarle el carro encima con tal de ponerse adelante o llegar más rápido.
Ya no se ponen direccionales, no se respeta el rebase, más es temerario; el flujo a una velocidad normal y en el carril es cosa obsoleta.
Siempre escuché a los que me decían que para manejar había que hacerlo de manera defensiva-ofensiva.
El impacto de lo que es el manejo en la República Dominicana hay que medirlo dentro de lo que es la psiquis del dominicano.
Cuando bajamos de un avión de lo primero que nos percatamos es de la bulla que producen algunos, por el intenso toque de bocinas, y por qué no las infracciones por andar con música a alto volumen.
Hay menos empatía en las personas, algunos son menos compasivos, menos humanos.
Y qué decir de las señales de tránsito, ceda el paso, el semáforo en su trío de colores, que cada uno tiene su importancia en la vía.
Es cierto que los tapones estresan, que se pierde la mitad del tiempo en ellos cuando se tienen que cumplir con las responsabilidades.
Pero en lo que se busca la solución a eso, que principalmente se soluciona si se cambia de comportamiento, y se dejan funcionar más los semáforos, ¿Qué podemos hacer para colaborar para que el caos sea menor?
Ser personas más pacientes de la que somos, entender que tirarle carro arriba a otro, no va a solucionar nada, más que gastos en la propiedad y lesiones.
Entender que somos más y mejores ciudadanos cuando damos ejemplo del buen comportamiento no importa las circunstancias.
Que uno que maneje bien, provoca el efecto en cadena, frente a los demás que solo generan situaciones estresantes en la vía.
Entender que todo el mundo no está apto para andar al volante, que es mejor si usted no está en la capacidad, andar en taxi o en transporte público.
Pienso y Luego Escribo: Eres luego existes.