La Bienal Internacional de Arquitectura y Urbanismo de República Dominicana premia la
Millones de brasileños desconfían de las elecciones debido a Bolsonaro
Tres de cada cuatro partidarios del presidente de Brasil confían poco o nada en el sistema de votación. Muchos dijeron que estaban preocupados por un posible fraude y advirtieron estar preparados para protestar.
DUQUE DE CAXIAS, Brasil.- Para muchos simpatizantes del presidente Jair Bolsonaro, las elecciones presidenciales de Brasil que se realizarán el domingo solo pueden tener dos resultados posibles: celebrar o tomar las calles. Eso se debe, según dicen, a que una derrota de Bolsonaro solo puede significar que la votación fue manipulada.
“Hay mucho fraude”, dijo Kátia de Lima, de 47 años, empleada de una tienda, en un mitin de Bolsonaro este mes. “Está comprobado”.
En el mismo mitin que se realizó al norte de Río de Janeiro, Paulo Roberto, de 55 años, trabajador del gobierno, comentó: “Cualquiera que vote por Bolsonaro está preocupado por las máquinas de votación”.
Y Fabrício Frieber, un abogado del estado de Bahía, agregó: “Bolsonaro nos viene advirtiendo”.
En el transcurso de su presidencia, Bolsonaro ha cuestionado y criticado la seguridad del sistema de votación electrónica de Brasil, a pesar de la falta de evidencia creíble de que exista un problema en el mismo. Ahora, al final de su primer mandato, está claro que sus ataques han tenido un efecto: gran parte del electorado de Brasil ha perdido la fe en la integridad de las elecciones de su nación.
Tres de cada cuatro partidarios de Bolsonaro confían poco o nada en el sistema de votación de Brasil, según varias encuestas de los últimos meses, incluida una realizada la semana pasada. Y en entrevistas con más de 40 de los partidarios de Bolsonaro en los últimos meses, casi todos dijeron que estaban preocupados por el fraude electoral y que estaban preparados para protestar si este pierde.
Esas dudas han socavado una de las democracias más grandes del mundo y es probable que terminen por ser uno de los legados más perniciosos de Bolsonaro, parte de una tendencia mundial de mentiras y teorías de conspiración, a menudo alimentadas por líderes populistas y amplificadas por el internet, que están amenazando las normas democráticas en Estados Unidos y en todo el mundo.
“¿Elecciones que no puedes auditar? Eso no es una elección. Es fraude”, declaró Bolsonaro a los periodistas en julio, al mencionar un reclamo común sobre el sistema electoral de Brasil. “Entregaré el poder, en unas elecciones limpias”.
Si Bolsonaro es derrotado y busca aferrarse al poder, parece que las instituciones democráticas de Brasil están preparadas para resistir. Pero también parece que algunos de sus seguidores están preparados para luchar.
“Si nuestro presidente no es elegido, todos vamos a Brasilia”, dijo Rogério Ramos, de 40 años, dueño de una tienda de electrónica automotriz, refiriéndose a la capital del país. “Cerramos el Congreso, como en el 64”.
En 1964, un golpe militar condujo a 21 años de una dictadura violenta en Brasil.
Muchas de estas advertencias son probablemente comentarios improvisados y no planes organizados de violencia. Las autoridades del orden público no han advertido sobre ninguna amenaza por parte de alguno de los grupos en caso de que Bolsonaro sea derrotado.
Pero el Supremo Tribunal Federal y el Tribunal Superior Electoral de Brasil aumentaron la seguridad, y el ejército se está preparando en caso de que haya descontento después de las elecciones, según dos altos oficiales militares que hablaron bajo condición de anonimato para comentar planes privados. El presidente o los tribunales podrían convocar a los militares para tratar de controlar a las multitudes violentas.
Bolsonaro también ha cuestionado la seguridad de las máquinas de votación electrónica de Brasil desde 2015, luego de que un candidato presidencial de centroderecha disputó una estrecha derrota. Bolsonaro, por entonces diputado, comenzó una cruzada apoyada en la afirmación de que las máquinas de votación eran vulnerables al fraude porque no están respaldadas por boletas de papel.
Bolsonaro tiene razón al decir que el sistema de votación de Brasil es singular. Es el único país del mundo que utiliza un sistema totalmente digital, sin copias de seguridad en papel.
Los expertos en seguridad informática que estudian el sistema dicen que su diseño en efecto dificulta la auditoría de una elección. Pero también dicen que el sistema tiene numerosas capas de seguridad para evitar fraudes o errores, entre estas están los lectores de huellas dactilares, pruebas de cientos de máquinas el día de las elecciones, inspección del código fuente por parte de expertos externos y el hecho de que las máquinas no se conectan a la red de internet, lo que reduce significativamente las posibilidades de un hackeo.
Desde que Brasil comenzó a usar máquinas de votación electrónica en 1996, no ha habido evidencia de que hayan sido utilizadas para fraude. En cambio, las máquinas ayudaron a eliminar el fraude que alguna vez afectó las elecciones de Brasil en la era de las boletas de papel.
Fuente: New York Times/ autor Jack Nicas