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Palabras de la Primera Dama Cándida Montilla de Medina en inauguración conferencia “Salud Mental y Discapacidad”
Doctor Lourival Baptista Neto, director de Servicios Clínicos en Psiquiatría Pediátrica en New York Prebysterian Hospital y con él las distinguidas personalidades nacionales e internacionales que nos acompañan en este importante día.
Miembros de la prensa
Amigas y amigos todos
Muy buenos días
El tema que nos convoca hoy reviste una especial importancia para la comunidad científica dominicana pero también para todas aquellas personas, especialmente los padres y madres, que deben hacer frente al diagnóstico de depresión recibido por uno de sus seres queridos.
El diagnóstico toma un cariz aún más inquietante cuando el paciente es un niño o una niña, a quienes nuestra cultura no nos permite ver como seres vulnerables a este tipo de enfermedades.
Hemos oído repetir tantas veces, y lo hemos repetido nosotros mismos, que la infancia es una etapa de la vida feliz por naturaleza, que hemos llegado a convertir esta idea en creencia.
Por eso, para el común de la gente, “los niños no se deprimen”. La consecuencia de esta ceguera es impedir que la depresión sea diagnosticada y tratada a tiempo.
La disertación sobre salud mental y discapacidad que nos ofrecerá el doctor Lourival Baptista Neto nos encara a la realidad. El problema no puede continuar siendo relegado por las políticas públicas en salud y la propia comunidad médica.
En lo que al Despacho de la Primera Dama respecta, es de interés fundamental contribuir no solo al debate dominicano de esta problemática, sino también a la búsqueda de soluciones concretas, particularmente en el caso de los niños y niñas con condiciones especiales.
Los factores de riesgo de esta población son muy diversos y numerosos. Van desde la limitación que impone la condición de discapacidad, principalmente en los casos de trastornos del espectro autista y parálisis cerebral, hasta el rechazo y la exclusión del entorno.
Está igualmente la ya mencionada escasa atención que la comunidad médica de todo el mundo presta a los síntomas de depresión en estos pacientes, de los que se atienden con prioridad los vinculados a su condición.
Hacer conciencia de los factores adversos al tratamiento adecuado de la depresión infantil, es avanzar en el camino de su prevención y de las soluciones. Pero sobre todo, es contribuir de manera eficiente a la salud integral de la población.
No es la primera vez que el doctor Baptista Neto visita nuestro país. Su más reciente estancia fue el pasado año, ocasión en la que puso sus conocimientos al servicio de padres, profesores y psicólogos de diferentes centros educativos.
Su reputación académica en el área de la psiquiatría pediátrica lo convierte en invitado obligado en todos aquellos espacios que trabajan por la salud física, emocional y mental de los niños y las niñas.
En esta su nueva visita a la República Dominicana, el Despacho de la Primera Dama se enorgullece de recibir al doctor Baptista Neto, a quien agradecemos en el nombre de la institución y en el mío propio haber acogido nuestra invitación con solidario entusiasmo.
Estoy segura de que sus conocimientos científicos, avalados por una vasta experiencia en la práctica hospitalaria, enriquecerán nuestra perspectiva terapéutica y permitirán al Centro de Atención Integral a la Discapacidad encarar con mayor éxito los muchos retos que tiene por delante.
¡Muy buenos días y que Dios les bendiga!
Santo Domingo, D. N.
28 de junio de 2017