Pensión para los huérfanos, de promesa a realidad

Yanira Fondeur
Promoviendo la Paz
La reintroducción que hizo recientemente el senador de la provincia Duarte,
Franklin Romero, con el propósito de que se otorgue una pensión especial a los
hijos menores de edad que quedan desamparados tras el feminicidio de sus
madres, es una medida acertada, necesaria y que debe contar con el apoyo de
los demás legisladores para su materialización.
Esta iniciativa revela la sensibilidad del legislador ante una población que ha
sufrido y, en muchos casos, sigue sufriendo violencia física, psicológica y
económica, aun cuando se encuentren bajo cuidado de familias acogedoras.
Sabemos que, en su discurso del pasado 27 de febrero el presidente Luis
Abinader se refirió a la creación de un programa de pensiones especial para los
huérfanos. Sin embargo, esta medida aún no está establecida por decreto,
mientras que una disposición legal le otorgaría carácter obligatorio al Estado,
garantizando su cumplimiento sin depender del gobierno de turno.
Es bien sabido que, es compromiso del Estadio de proteger a los niños, niñas y
adolescentes, especialmente cuando se encuentran en situación de
vulnerabilidad debido a que sus padres han asesinado a sus madres y, en
muchos casos, se han suicidad, dejándolos huérfanos por partida doble de la
noche a la mañana.
Aspiramos a que la pieza legislativa sea conocida y aprobada con celeridad
para brindar un alivio a estos infantes, quienes quedan desprovistos de apoyo
económico y, en la mayoría de los casos, tampoco reciben la atención
psicológica necesaria para superar el trauma.
Ahora bien, nos preguntamos ¿Cuenta el Estado estadísticas oficiales sobre
los huérfanos de feminicidios íntimos?, ¿A partir de que fecha podrán
beneficiarse con la pensión?, ¿Cuál será el monto?, ¿A qué tutor se le
entregaría?, ¿Se asignarán alguna comisión especial para dar seguimiento y
garantizar que la pensión se utilice adecuadamente?
Según el registro que llevamos desde la Fundación Vida Sin Violencia para el
año 2020 contabilizamos 52 huérfanos de feminicidios íntimos, 69 en 2021, 70
en 2022, en 2023, 68 y en2024, 54, para un total de 313. No obstante, estas
cifras no incluyen el subregistro, ya que en muchas ocasiones los medios de
comunicación no establecen la cantidad de hijos de las víctimas.
Faltaría, además, establecer la cifra correspondiente al presente año.
La infancia es el presente y el futuro de nuestra nación y merece toda la ayuda,
protección y cuidados necesarios para su bienestar, paz y un sano desarrollo.
La autora es la presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia
@Yanira_Fondeur