Qué piensan los expertos sobre la vacuna de Oxford y AstraZeneca que se producirá en la Argentina
Luego del anuncio de Alberto Fernández de que comenzará a fabricarse en la Argentina y que estará lista el primer semestre del 2021, los especialistas opinaron sobre este desarrollo
El presidente Alberto Fernández anunció esta tarde que se fabricarán en el país entre 150 y 250 millones de dosis de la vacuna de Oxford-AstraZeneca para ser distribuidas en toda América Latina, con excepción de Brasil. Además, será producida en conjunto con México y tendrá un precio accesible: valdrá entre 3 y 4 dólares.
“Queremos que Argentina no tenga que esperar y pueda acceder lo más rápido posible”, afirmó el jefe de Estado en el anuncio. Y agregó: “Para nosotros es una gran alegría. En Argentina AstraZeneca eligió al laboratorio mAbxience que será el productor del reactivo de la vacuna, es un reconocimiento a la calidad de los laboratorios argentinos. México será el encargado de envasar la vacuna y completar el proceso de producción”.
De todos los proyectos para prevenir el COVID-19 el la Universidad de Oxford es uno de los más avanzados y prometedores. El lunes 20 de julio se habían dado a conocer los resultados provisionales del ensayo COV001 Fase I / II en curso que mostraron que AZD1222 fue tolerado y generó respuestas inmunes sólidas contra el virus SARS-CoV-2 en todos los participantes evaluados.
“La vacuna tomará un tiempo. Empezamos este trabajo al comienzo del año y nuestra intención es movernos lo más rápido posible con la tecnología que tenemos a nuestro alcance. Todos están trabajando muy duro para poder alcanzar los resultados y nuestra esperanza es poder empezar a distribuirla antes de que termine el año”, le había asegurado a Infobae Pascal Soriot, director ejecutivo de AstraZeneca, la multinacional farmacéutica anglo-sueca en asociación con la Universidad de Oxford, durante el lanzamiento web de los resultados.
Ahora, según lo confirmado por el presidente, todo parecería indicar que la vacuna estará lista durante el primer semestre del 2021.
Para el infectólogo Lautaro de Vedia, ex presidente de la Sociedad Argentina de Infectología, “es interesante la posibilidad de que se pueda fabricar la vacuna en la Argentina. Lo que es importante recalcar es que todavía no ha sido demostrada su eficacia todavía, está en investigación. Confiamos porque los resultados de la fase II han sido muy buenos pero todavía falta. De todos modos, el anuncio es muy positivo, y tenemos que tener en cuenta los tiempos porque la vacuna va a estar disponible los primeros meses del año que viene, y es un buen tiempo si la tenemos antes del invierno”.
“Esta vacuna ya ha superado la fase I y la fase II con buenos resultados”, explicó en diálogo con Infobae la infectóloga pediatra y epidemióloga Ángela Gentile, jefa del Departamento de Epidemiología del Hospital de Niños “Ricardo Gutiérrez”. “La fase I mide fundamentalmente la seguridad y la fase II mide la respuesta de anticuerpos e inmunidad celular, es decir, mide protección. Las ha superado con éxito, estos datos están publicados, supera incluso el de plasma de convalecientes y los eventos adversos han sido pocos generalmente: algo de fiebre, puede aparecer dolor de cabeza, decaimiento, pero fácilmente superables”.
“Ahora se está encarando la fase III. Tenemos que esperar hasta fines de octubre para ver los resultados. Sin embargo han sido tan alentadores los resultados de fase I y fase II, teniendo en cuenta que esto es una pandemia, que el laboratorio ha comenzado fuertemente a producir vacunas paralelamente a la fase III, cosa que no es demasiado habitual y que lo explica la situación que estamos viviendo. Creo que es muy prometedora”, agregó.
“La vacuna de Oxford es muy interesante porque es la única que utliza adenovirus de chimpacé”. Lo precisó a Infobae el doctor Ricardo Rüttimann, médico infectólogo de la Fundación del Centro de Estudios Infectológicos, quien explicó las características propias de la vacuna que se producirá en la Argentina. Remarcó el mismo punto el infectólogo Eduardo López: “Es una muy buena vacuna. Es una vacuna vectorial, adenovirus de chimpancé. Los datos de la Fase II son muy buenos pero hay que hacer los estudios de eficacia con un número de mayor de pacientes, es decir, no menos 20.000″.
Por su lado, el infectólogo Tomás Orduna explicó que “todavía nos quedan 8 o 9 meses hasta tanto tengamos acceso a la vacuna, o por lo menos aquellos que más la necesiten. El presidente ya hizo hincapié sobre la importancia de seguir cuidándose, quedarse en casa, mantener distancia social. Va a ser la única manera de frenar esta pandemia que en el hemisferio norte está evidenciando un segundo brote”.
Y aclaró: “Una vez que la vacuna termine las fases de estudio clínico, es presentada por el laboratorio a las diferentes agencias nacionales de salud, como la FDA o EMA en Europa. En Argentina lo debe aprobar la ANMAT. Y luego comienza formalmente la producción y distribución”.
La infectóloga Romina Mauas, coordinadora médica de Helios Salud y miembro de la SADI, describió la noticia como un gran paso hacia adelante: “Es un orgullo que la ciencia argentina participe y sea protagonista en la lucha contra esta pandemia”.
Más detalles sobre la vacuna
Los resultados en The Lancet confirmaron que una dosis única de AZD1222 resultó en un aumento de cuatro veces de los anticuerpos contra la proteína del pico del virus SARS-CoV-2, en el 95% de los participantes un mes después de la inyección. En todos los participantes, se indujo una respuesta de células T, que alcanzó su punto máximo el día 14 y se mantuvo dos meses después de la inoculación.
Estos estudios iniciales confirmaron que la vacuna fue capaz de generar anticuerpos en los seres humanos y no tiene eventos adversos severos. Según los voceros científicos de AstraZeneca y los científicos de Oxford a Infobae: “Los datos de fase I / II en 1.077 voluntarios adultos sanos entre los 18 y 55 años muestran que la vacuna no condujo a ninguna reacción inesperada y tuvo un perfil de seguridad similar a las vacunas anteriores de este tipo”.
Las respuestas inmunológicas fueron más elevadas en aquellos que recibieron una segunda dosis. “Vimos la respuesta más fuerte en los 10 participantes que recibieron dos dosis de la vacuna, lo que indica que esta podría ser una buena estrategia para la vacunación”, indicó el profesor Andrew Pollard.
Los efectos adversos incluyeron dolor y sensibilidad en el lugar de la inyección temporal, dolor de cabeza de leve a moderado, fatiga, escalofríos, fiebre, malestar y dolor muscular. No se informaron eventos adversos graves con AZD1222, y las reacciones disminuyeron con el uso de paracetamol profiláctico, un analgésico, y ocurrieron con menos frecuencia después de una segunda dosis.
Fuente: Infobae