Sexualidad en cuarentena

Soraya Lara| Psicóloga -Terapeuta Familiar

Si observas inhibición en su respuesta sexual en estos días, específicamente en la más conocida por todos, el coito. Te recomiendo no angustiarte, pues ante situaciones de estrés incontrolable esto le podría pasar a algunas personas.

Creo que preocuparse excesivamente incrementaría la tensión y, de esta forma, sin darse cuenta de que retroalimentaría negativamente la respuesta sexual. Es preferible acudir a los juegos eróticos sin proponerse la penetración. El erotismo es muy gratificante y le ayudaría a relajarse.

El erotismo en la pareja ofrece la oportunidad de descubrir zonas corporales poco conocidas. Es oportuno explorar ambos cuerpos con libertad en beneficio del fortalecimiento de la intimidad emocional y el disfrute sexual.

Muchas parejas no han desarrollado la capacidad de identificar cuáles son las zonas de mayor excitación y placer. Detenerse en la exploración y entregarse a sentir y hacer sentir aumenta el grado de satisfacción erótica.  Es hacer del amor un arte sensorial de gratificación insospechada.

Hacer de la sexualidad una competición gimnástica que se fundamenta en el rendimiento y la demostración de virilidad copuladora, no es más que una distorsión que remite a un acto mecánico en el que se pierden la espontaneidad, la capacidad de fantasear y de disfrutar del acto de entrega mutua y se evaden la sensibilidad corporal y las zonas erógenas.

Estos tiempos de COVID-19, han involucrado a la pareja en una serie de tareas hogareñas y laborales que han modificado la cotidianidad, y los encuentros con la pareja después de una jornada de trabajo.

El incremento del tiempo que pasan juntos es una realidad inesperada que, posiblemente, en principio, se reflejará en la respuesta sexual. Posteriormente, también incidirán las tensiones no sólo por el miedo a contagiarse, sino a enfrentar el estrés cotidiano  generado por las actividades del hogar y el teletrabajo, a lo que se agregarán y las desavenencias conyugales acumuladas.

Conflictos acumulados antes de la cuarentena podrían hacerse crónicos y afectar el funcionamiento sexual. Emocionalmente la pareja se bloquea e inhibe la respuesta sexual.

Si el órgano sexual de mayor sensibilidad es la piel, ¿por qué no apropiarse del disfrute sensorial y dejar fluir la imaginación en beneficio de una gratificación anteriormente no experimentada?

La piel, las manos, los labios, la respiración y el olfato comunican.  Es tiempo de disfrutar de la sexualidad, la sensualidad y el erotismo.

Twitter @sorayalaracaba