La Bienal Internacional de Arquitectura y Urbanismo de República Dominicana premia la
Violencia en el noviazgo
Promoviendo la Paz
Yanira Fondeur
El noviazgo es una etapa hermosa entre los adolescentes, en la que se suele idealizar la cultura del amor romántico hacia la pareja, sin embargo es posible que puedan normalizar conductas tóxicas, ya sea por desconocimiento o experiencia y estas gradualmente constituirse en las primeras señales de violencia.
Al principio de esta etapa todo parece perfecto, se comparten los mismos gustos y en la mayoría de los casos las chicas sueñan con un amor incondicional abnegado, en que se nos enseña a soportar, a sacrificar los gustos, a esperar lograr un cambio de comportamiento, sin visualizar que estas conductas son discriminatorias.
En los talleres denominados “Noviazgo Feliz” que impartimos desde la Fundación Vida Sin Violencia, recibimos testimonios de chicas desde los 12 años, cuyas parejas ya les controlan la forma de vestir, las amistades con que se relacionan y la culpabilizan de todas las diferencias que existen en sus relaciones amorosas.
Otras, nos han revelado como sus novios le han regalado un celular, con el supuesto objetivo de mantenerse mejor comunicados, y luego reconocen que la mantienen en un control absoluto, cuestionándole con quien está, porque llega tarde, posteriormente revisándoselos con “derecho” para ver con quienes han tenido comunicación, conducta que se extiende a indagar de quien o quienes recibe mensajes y les contestan, ejerciendo así abuso psicológico y consecuentemente violencia de género.
El amor no es control, es la frase que siempre repetimos a los y las adolescentes. En el amor ha de primar el respeto, admiración, comunicación afectiva, comprensión, confianza, sinceridad y cortesía, entre otros.
En cambio en las relaciones tóxicas la pareja trata siempre de controlar, critica constantemente, la culpabiliza de todo, por lo general amenaza, trata de aislarla de familiares y amistades, impone su voluntad así como presiona.
Las consecuencias de la violencia en el noviazgo son iguales que en la edad adulta, ya que provocan estado de ansiedad, miedo, inseguridad, insomnio, asilamiento y bajas calificaciones en los casos de estudiantes.
Para prevenir situaciones discriminatorias debemos siempre educar para que las chicas, que son mayormente las víctimas, se valoren reconociendo que son únicas y especiales, que pongan límites claros y definidos, y nunca guarden silencio ante un maltrato, más aún cuando lo reciban en forma constante y ascendente deben buscar en familiares y amistes redes de apoyo, porque en definitiva merecemos una vida libre de violencia.
Recordemos que existen en el país líneas telefónicas de auxilio gratuitas para denunciar, como son Línea Vida al 809-200-1202, la Unidad de Atención y Prevención de la Violencia de Género y Abuso Sexual del Distrito Nacional en el 809-533-6688, el Ministerio de la Mujer en el 809-200-7212, 911, o en cada fiscalía comunitaria.
Nada justifica los malos tratos en las relaciones, es por eso que más vale prevenir que remediar como dice el popular refrán.
La autora es la Presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia.