#YoSoyVenezuela

Pienso y Luego Escribo

Iranna Flaviá Luciano

Quien no conoce su historia está condenado a repetirla.

Voy a comenzar esta historia diciéndoles un secreto, siempre que ando por la calle aun sintiendo un gran amor por mi patria e identificándome plenamente con ella, y entendiendo que vivimos en un pequeño pedazo de tierra donde Dios puso todo, me preguntan si soy venezolana.

Hasta los mismos venezolanos en la calle me han preguntado si lo soy, y tengo que reconocer que me siento halagada, y altamente distinguida por tan grata comparación.

Venezuela por años ha sido una de las mecas donde se han producido una de las mayores cantidades de reinas de belleza en el mundo, le dicen la fábrica de belleza, y eso, que siempre he dicho que en dominicana es uno de los países que más mujeres exóticas y bellas tiene.

Comencé cuando apenas tenía 14 años como modelo de agencias, pero mi sueño siempre fue concursar en Miss República Dominicana, quería representar a mi país fuera, pero por cuestiones de que sin tacos no llegaba a la estatura 5 10, solo tengo 5’ 7, aunque siempre reconocieron que tenía rostro.

Eso les lleva a pensar que soy una fiel admiradora de la belleza y de los concursos, por lo que por años los he seguido, y siempre he reconocido lo hermosas que son las venezolanas, cosa que de por sí es una carrera.

Venezuela no solo se distingue por ser un país donde hombres y mujeres al igual que yo han entendido que la imagen es importante, sino por su petróleo, un país rico y próspero, admirado por muchas naciones.

Pero, según mi experiencia, hay una cualidad que distingue aún más a los venezolanos, y es su cultura.

Me gusta invertir tiempo con personas inteligentes, y de mentes evolucionadas, y déjenme decirles, que he tenido el placer de hablar con 3 venezolanos en mi vida, y es sorprendente lo jugosa de la conversación, lo pausada, educada, y con variados elementos. Soy curiosa, investigadora, de mente inquieta, y librepensadora.

Hay una situación que he venido siguiendo, y que me preocupa, y es la situación de algunos venezolanos en el país.

Les voy a hacer una pregunta amables lectores: Han observado a qué vienen a trabajar el grueso de los venezolanos que le huyen a la crisis de su país? Y la otra es: Quién se va de un país que les brinde todas las oportunidades, donde no haya hambre ni problemas de seguridad? Tal vez unos pocos, y a países exóticos por asuntos de clima.

El problema de la migración es una realidad en todos los países que poseen un mayor poder adquisitivo y económico, sino pregúntenles a los dominicanos que emigran mayormente a los Estados Unidos y a Europa, y que antes lo hacían a la dorada Venezuela de los 80’s.

Aquí en la actualidad hay una situación con los venezolanos que están emigrando a nuestro país en cantidades discretas en comparación a otros inmigrantes, pero a qué?

Huyendo de un país donde hay casi una crisis humanitaria, que no les garantiza ni el alimento para sus hijos, ustedes que son padres, imaginan lo que harían por alimentar a sus hijos? Creo que absolutamente todo.

Venezolanos graduados de carreras universitarias, formados, vienen aquí a servir de taxis, vender cargadores de celulares y pañitos de cocina, flanes, chocolates, a vender libros, arepas, hacer de animación en las calles, todo lo anterior por SOBREVIVIR, que no haría un ser humano por sus hijos primero, y luego por el para sobrevivir.

A países de gente buena como esta República Dominicana, donde no es prioridad enseñarles su historia, les recuerdo o les aporto algo respecto a Venezuela:

• Venezuela es un país amigo: Saben el significado de la palabra de AMIGO, está compuesta de cinco letras donde cada una tienen un gran peso, el verdadero amigo estaría dispuesto queridos lectores a hacer literalmente cualquier cosa por nosotros.
• Juan Pablo Duarte: Con el debido respeto que merece el dominicano más ilustre, trascendental y grande de todos los tiempos, pregunto por si alguien tiene alguna duda o no lo conoce, Quién es Juan Pablo Duarte? Es nuestro prócer y mártir, Padre de la Patria, a quien le debemos nuestra soberanía. Sudor, sacrificio, lágrimas, soledad y olvido fue poco para lo que sufrió, y todo por defender un ideal y atender a esa llama patriótica y valiente, como muy pocos dominicanos estarían dispuestos a defender. Duarte se exilió durante los últimos años de su vida en un país que lo acogió y lo protegió, y saben dónde fue? En VENEZUELA.
• Venezuela siguiendo con su rol histórico siguió demostrando amistad por República Dominicana, y en tiempos de la tiranía trujillista, fueron muchos los críticos y los que estaban en contra del régimen, a los que ese país amigo les dio acogida y protección, se puede apreciar en el documental del periodista Fernando Quiroz: Las Expediciones de junio hacia la libertad o la  muerte,  tanto así que nuestro dictador en respuesta a ese favor concedido se le atribuye un atentando al entonces presidente Rómulo Betancourt.
• Pero Venezuela no queda ahí con nosotros, numerosos acuerdos petroleros, eléctricos, comerciales y educativos se han firmado en vías de desarrollar ambas naciones, y para alivianar los problemas nacionales.
• Y qué decir del gran apoyo que hemos tenido a nivel artístico, con merengueros como Fernando Villalona, Wilfrido Vargas, Eddy Herrera, Bonny Cepeda, que no solo han tenido una casa en Venezuela, sino un gran impulso para sus carreras.
• Venezuela por años nos ha deleitado con sus telenovelas, díganme quien no ha disfrutado con actores como Víctor Cámara y Guillermo Dávila.

#YoSoyVenezuela no solo es un hastag, es una tendencia mundial a la que está llamada a liderar todos los dominicanos en respuesta a la amistad y solidaridad que hemos recibido de Venezuela, que llama primero a la comprensión y a la flexibilidad del tema venezolano en el país, y a buscar soluciones amigables.

Los que vienen aquí no son de cualquier país, son VENEZOLANOS, nuestros AMIGOS y HERMANOS, que no han hecho más que aportarnos.

Respecto a Nicolás Maduro solo me resta decir que no voy a calificar su gestión ni de buena ni mala, pero que me llama sobremanera la atención, y me pone a pensar, que vea a su pueblo sufrir y que no haga nada; el tiempo se encargará de poner las cosas en orden, y de colocarlo en su justo lugar en las sillas de la historia.

Pienso y Luego Escribo: 11 Cuando yo era niño, hablaba como niño, pensaba como niño, juzgaba como niño; más cuando ya fui hombre, dejé lo que era de niño.

12 Ahora vemos por espejo, oscuramente; más entonces veremos cara a cara. Ahora conozco en parte; pero entonces conoceré como fui conocido.

13 Y ahora permanecen la fe, la esperanza y el amor, estos tres; pero el mayor de ellos es el amor. Corintios 13: 11-13.

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