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Zoe Saldaña, mujer inspiradora
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Yanira Fondeur
Promoviendo la Paz
Muy cercana fecha de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, Zoe Saldaña se convierte en la primera dominicana en obtener un Oscar de la Academia como Mejor Actriz de Reparto, un logro que nos llena de orgullo e inspiración.
Sabemos lo competitiva que es la industria cinematográfica, la entrega y dedicación que implica adentrarse en un papel, asumirlo como real y visibilizar el poder femenino.
Sus palabras al recibir el preciado galardón dorado no pudieron ser más emotivas. En primera instancia, buscó con la mirada a su madre en el público y al identificarla no logró contener sus lágrimas de gratitud, tanto hacia ella como hacia toda su familia, a quienes calificó de valientes y reconoció como su gran red de apoyo.
Agradeció a la Academia por distinguir el heroísmo silencioso y el poder de una mujer como Rita Pérez, personaje con el que obtuvo el galardón.
El hecho de que destacó con orgullo su origen como hija de padres inmigrantes resalta sus raíces con la humildad y dignidad que le caracterizan y la engrandecen como persona.
Asimismo, el reconocimiento al talento y la bendición que representó haber sido nominada con otras cuatro mujeres brillantes demuestra su sororidad inspiradora. Es un mensaje que debe prevalecer entre la población femenina, pues cuando una mujer triunfa, representa a todas.
Además, Zoe mostró un profundo sentido de solidaridad al compartir su premio con todo el elenco de la película, las empresas que le apoyaron y el equipo de asesores que la guió y respondió sus correos incluso en horarios nocturnos.
Destacó también el apoyo incondicional de su esposo e hijos, a quienes agradeció por llenar cada noche su cielo de estrellas, enfatizando que la familia es esencial en su vida.
Una figura clave en su trayectoria ha sido su abuela materna Dolores Argentina Cesse, quién llegó a Estados Unidos en 1961. En un emotivo momento “Yo soy una orgullosa hija de padres inmigrantes con sueños, dignidad y manos trabajadoras”.
Saldaña concluyó su discurso reafirmando que, aunque es la primera estadounidense de origen dominicano en recibir un Oscar de la Academia, está segura de que no será la última. Un mensaje esperanzador que inspira a más mujeres a destacar en la industria cinematográfica.
Con fe y perseverancia, los sueños pueden hacerse realidad y disfrutar en paz.
La autora es la presidenta de la Fundación Vida Sin Violencia
@Yanira_Fondeur