Cuál es el mensaje de Dios para nosotros en Semana Santa

 

Iranna Flaviá Luciano
Pienso y Luego Escribo

 

Estamos en un tiempo que catalogo como muy hermoso, en la Semana Mayor, Santa.

Es uno de los tiempos litúrgicos más importantes para toda la Iglesia Católica y todo  el creyente, por celebrar y recordar  la pasión, muerte y resurrección de Jesús.

Es un período de 8 días que comienza en domingo de ramos y termina en el domingo de resurrección.

Las mayores celebraciones de la Semana Santa se llevan a cabo desde el jueves santo hasta el domingo de resurrección.

Muchas personas se preparan para este día como si fuera la semana principal de las vacaciones, que aunque no está mal puesto hay diferentes formas de reflexionar que necesariamente no tienen que ser desde el silencio, más si de pensamiento.

Más importante para muchos es el protector solar, la toalla, los lentes, el traje de baño, las fotos, Facebook e Instagram que hacerse acompañar por la biblia.

Para algunos es muchísimo más relevante encontrarse en un resort, balneario, río o playa que en la Iglesia, cuando hay más que ocasiones para disfrutar de los placeres de la vida.

Me pregunto ante todo este alboroto: Cuál es el mensaje de Dios para nosotros en Semana Santa?

Lo primero es pensar para qué existe la Semana Santa, puesto que es un tiempo de recordar, de llevar el pensamiento a esos momentos donde Jesús murió por nosotros en la cruz, y todo lo que tuvo que pasar para que eso fuera una realidad.

Lo segundo es pensar en la forma en que Dios ama al mundo, nadie ama más a un hijo que una madre y su padre, así en esa dimensión e incomparablemente nos ama Dios, que mandó su único hijo a que muriera en la cruz por nuestros pecados.

Lo tercero es ver el llamado que nos hace Dios a que lo busquemos, no importa como, por medio de la oración, asistiendo a misa, siendo buenos hermanos, actuando de manera empática con todo el que nos rodea, porque a cada momento nos llama ante su presencia para que lo sigamos.

Lo cuarto es reflexionar, recogerse, dar importancia a lo que lo merece, ser más humildes de corazón, lograr la paz tanto en el interior como con los demás, y ser fieles a nuestras creencias.

Lo quinto es que si decidiste vacacionar pienses que vas a regresar, que todo no queda allí, que manejes con prudencia, que no ingieras bebidas mientras conduces y cuando lo hagas hacerlo con moderación, pero sobre todo que le saques un espacio de tiempo a Dios no importa a qué hora, que conectes con el, que le agradezcas por la vida y por el privilegio de tener personas a quien amar y por quien vivir.

Lo sexto es vivir con la esperanza de la resurrección, que Jesús siempre estará vivo en nuestros corazones, que por más turbulencias que puedas tener en tu vida, Dios siempre nos tiene reservado un nuevo amanecer, un nuevo comienzo.

Pienso y Luego Escribo: Aquí, allá, adentro y afuera, nuestro pensar y nuestras acciones dicen lo mismo cuando Dios vive en nuestras vidas.