Tragedia, gobierno y justicia

El pasado martes ocho de abril en la madrugada los dominicanos fueron sacudidos por la explosión del techo del reconocido centro de diversión Jet Set de la ciudad de Santo Domingo, capital de la República Dominicana.

Como era costumbre, los lunes en su tradicional fiesta, el centro de espectáculo con más de medio siglo de existencia era visitado por decenas personas tanto dominicanos como extranjeros.

La fatídica noche del martes hasta el momento de acuerdo a informes prensa han fallecido más de doscientas personas a consecuencia del desprendimiento del techo.

El doctor Víctor Atallah como ministro de Salud Pública ha confirmado que la cifra de fallecidos debido al colapso de la discoteca Jet Set se ha incrementado a 225, incluyendo 221 recuperados de la zona cero y cuatro que lamentablemente sucumbieron tras ser trasladados a hospitales.

Personas de los diferentes sectores productivos desde la política, economía y el deporte perdieron la víctima del desprendimiento del techo del centro de espectáculo.

Entre las víctimas de encuentran la estrella del merengue, Ruby Pérez, el diseñador Martin Polanco, los exjugadores de las Grandes Ligas, Octavio Dotel y Tony Blanco. El luto no solo ha sido en la República Dominicana, sino en Colombia, Nueva York, Nueva Jersey, Puerto Rico y Perú, naciones que también fueron afectadas por el fallecimiento de un pariente o familiar.

El gobierno de la nación dominicana encabezado por el presidente Luis Abinader quien decretó tres días de luto nacional se comprometió en investigar lo sucedido para determinar responsabilidades.

A pesar de que el Jet Set con capacidad para unas mil personas mostraba signos progresivos de deterioro como las filtraciones, humedad, desprendimiento del techo y falta de mantenimiento continuaba operando sin ningún tipo de restricciones en la organización de espectáculos artísticos.

El Jet Set al igual que los demás centros de diversión en el territorio dominicano pocas veces o nunca son supervisados por las autoridades del gobierno. Se espera que a partir del presente trágico suceso que ha traído luto y dolor a las familias dominicanas y que ha supera en víctimas a fenómenos como huracanes, ciclones, inundaciones, marea alta, terremotos y temblores de tierras sea el inicio que le permita al gobierno establecer y aplicar un protocolo para evitar que se repita un fenómeno de tal magnitud en el territorio dominicano.

La ocasión es propicia también para que la justicia a través de la Procuraduría General de la República determine responsabilidades materiales sobre la catástrofe ocurrida en el Jet Set. Los dominicanos esperan que en el presente caso se haga justicia.